Los próximos pasos de los empleados de estaciones de servicio con la CGT unificada

Carlos Acuña, Secretario General de la Federación de Obreros y Empleados de Estaciones de Servicio (FOESGRA) asegura estar concentrando sus esfuerzos para que el próximo 22 de agosto el movimiento sindical comience a trabajar formalmente en unidad, tal como fue consensuado por Hugo Moyano (CGT Azopardo), Antonio Caló (CGT Alsina) y Luis Barrionuevo (CGT Azul y Blanca).

Acuña, por su parte, forma parte de las filas de Sergio Massa, líder del Frente Renovador, y acompaña desde hace años a Barrionuevo, sin saber qué rol ocupará en la nueva estructura: “no se empezó a hablar de cargos; siempre se define el último día a última hora”.

Por su llegada a la cúpula de la CGT, no se descarta que pueda ocupar un puesto de peso en la Comisión Directiva, aunque aclara que no es hoy su preocupación.

Sobre los planes de Gobierno y el famoso segundo semestre, el dirigente empezó a deslizar serias críticas: “ojalá baje la inflación, pero si cae va a ser producto de la recesión; hasta ahora lo que hubo fue una transferencia de ingresos desde los trabajadores a las grandes empresas, al Gobierno y poderes económicos”.

¿Cuál será el reclamo a los expendedores de combustibles en este escenario? En septiembre comienza la paritaria para definir un porcentaje hasta marzo y Acuña avizora un panorama complicado: “cuando las estaciones andaban bien un poco más nos podían plata; ahora que dicen que vendieron un 15 por ciento menos, va a ser peor”.

Y si bien reconoce la importancia de proteger los puestos de trabajo, Acuña aclara que “vamos a defender el poder adquisitivo con todas las herramientas disponibles. Si tenemos que llegar al conflicto, lo vamos a hacer”.

En base a las declaraciones del Ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay, consideró que la inflación de 2016 será “como mínimo del 42 por ciento”. A cuenta rápida, sin previo estudio del comité ejecutivo, señala que debería agregarse un 18 por ciento al 24 conseguido a principios de año. “Uno no puede salir a decir una cifra porque no se sabe qué puede pasar en estos meses”, explicó.

Y si bien en el sector que conduce no se relevaron bajas de personal, Acuña advirtió que en otras actividades “el goteo de despidos es permanente; me intranquiliza que el Gobierno no se preocupe”.