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Si bien son muchos los aspectos involucrados en la discusión paritaria, los valores de los combustibles en baja ocupan un papel fundamental en la rentabilidad de las estaciones de servicio. Hoy los precios de surtidor se encuentran en el mismo nivel que hace siete meses atrás.
Después de un año convulsionado en materia de precios, la reducción de los valores de las naftas y el gasoil decidida por el Gobierno y las empresas petroleras desde el 1º de enero retrotrajeron la situación de las estaciones de servicio a julio de 2014.
De este modo, la evolución del 33.7 por ciento que sufrieron los combustibles se licuó a un 27, un índice que se ubica por debajo del aumento salarial conseguido por los empleados de la actividad en la negociación paritaria de período anterior.
¿Condicionará este nuevo escenario la negociación paritaria de este año? Seguramente que sí, tal como fue advertido recientemente por los expendedores que comercializan los productos a través de la red de YPF. “Los gremios están con expectativas que son absolutamente inalcanzables para los operadores, al menos con seguridad para los de YPF, que trabajamos con márgenes reducidos y en un contexto de suba de todos los costos”, señaló al respecto el presidente de la entidad que las nuclea.
Desde la Confederación de Entidades del Comercio de los Hidrocarburos (CECHA) también alertaron el cambio de condiciones: “las estaciones de servicio siguen con los mismos costos operativos y no recibieron ninguna compensación, por ello resulta insólito que se pretenda que asuman el costo de un acuerdo, en el que no han tenido ninguna participación, ni han recibido ningún beneficio”, afirmó su titular, Oscar Díaz.
Por el lado de los trabajadores, ya adelantaron que no quieren ser la variable de ajuste y que su reclamo estará en sintonía con el crecimiento del índice de inflación. Su máximo exponente, Carlos Acuña, relativizó la baja argumentando que “la disminución es ínfima, es una medida política”.
En este contexto la premisa es el sostenimiento de los puestos de trabajo y la supervivencia de las empresas. La búsqueda del equilibrio aparece como el principal objetivo del debate entre empleados y operadores de manera de mantener la continuidad de los negocios y la estabilidad laboral.
creo que la baja del precio de los combustibles en los surtidores no debería influir en el aumento de sueldo prevista para este año Ya para qué hayan bajado los precios de los combustibles en las estaciones de servicio seguramente también compraron más barato los combustibles ya que la baja del precio se debió a que el petróleo también bajó de precio.
Los aumentos salariales de los últimos años es un insulto para el trabajador ya que difiere mucho de los aumentos globales de todo… La culpa no es de los empresarios sino de la dirigencia sindical que nos representa. De ser un empleo que era bien remunerado paso a ser uno de los más lastimosos.
Así que lo único que le pido a nuestros representantes sindicales es que se plantee un aumentó que justifique las exigencias y peligros del trabajo que realizamos.
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