La polémica por las condiciones que imponen las entidades emisoras de tarjetas de crédito y débito continúa en el Congreso, donde se están tratando un total de cuatro proyectos de ley para reducir los plazos y comisiones de las operaciones a través del plástico, de los cuales, los dirigentes estacioneros vienen siendo protagonistas en el impulso de estos cambios.

“Cada vez que metemos mano en el motor, nos rinde menos kilómetros”, fue la frase con la cual, Hugo Flores, el director ejecutivo de la banca especializada, comparó la situación, ante los legisladores de las comisiones que intentan emitir un dictamen para que las tarjetas de débito acrediten al instante las compras de los clientes.

Otro de los expositores, en este caso, César Bastien, quien se desempeña como director ejecutivo de la Cámara de Tarjetas de Crédito y Débito, negó rotundamente que las comisiones de las tarjetas en Argentina sean costosas.

Por el contrario, afirmó que se trata de los valores más baratos de toda la región, incluyendo a los Estados Unidos, pero aclaró que el gran monto que abarca el porcentaje que se le descuenta a los comercios corresponde a gravámenes del Estado Nacional como IVA, Ingresos Brutos e impuesto a los débitos.

“De cada 100 mil pesos que vende un comercio, solamente 2 mil le quedan a las entidades emisoras y casi 8 mil pesos los toma el Estado con impuestos, con lo cual, el comerciante se queda con 90 mil pesos”, detalló el ejecutivo.

En este contexto, el empresario justificó los números que defienden los bancos diciendo que “la comisión de las tarjetas está distorsionada por las cargas impositivas”, a la vez que defendió por otra parte el plazo de acreditación de los montos en la cuenta del negocio que vende.

En ese sentido, recordó que cuando se redujo el tiempo de 28 días a 10 días hábiles, se produjo lo que denominó un “descalce en el financiamiento de los costos de las entidades financieras, que en caso de que se vuelva a achicar ese plazo, se tornará imposible hacer frente a la operatividad del sector”.

Por su parte, Mario Cesário, presidente de la Asociación de Bancos Argentinos, coincidió con los cálculos de Bastien y aseveró que “resulta impracticable, desde todo punto de vista”, el proyecto de ley del diputado Carlos Ponce para la acreditación inmediata en cuenta del comerciante, del monto de las operaciones realizadas por medios electrónicos con tarjeta de débito.

Finalmente, los representantes de los bancos, convocaron a realizar acciones para incrementar el consumo y formalizar la economía, para lo cual, el sector de tarjetas resulta fundamental.