El buen momento de la industria automotriz y la suba de precios de los combustibles líquidos beneficiaron al GNC. Según el informe mensual de ACARA, la entidad que reúne a las concesionarias locales, en los primeros cinco meses del año se entregaron 422.225 vehículos, lo que representa un crecimiento del 8 por ciento en comparación con el mismo período de 2012. Durante el mismo período de tiempo, las naftas subieron hasta un 15 por ciento en todas las marcas.

En el sector explican que estos factores económicos fueron los que impulsaron las ventas de GNC. Según información oficial, los talleres de conversión de vehículos a gas pasaron de incorporar 8583 equipos en febrero, a 11.116 en marzo, 12.193 en abril y 13.869 en mayo.

Actualmente, el precio del metro cúbico de gas cuesta la tercera parte que un litro de nafta súper en cualquiera de las estaciones de servicio del país. Por lo tanto, quien gasta 1500 pesos mensuales con su auto naftero, ahorra 1000 una vez que realiza el cambio, lo que le permite recuperar la inversión en menos de un año. Actualmente los tubos se ofrecen en promedio a 9000 pesos, incluida la instalación.

Desde que la Secretaría de Comercio Interior aplicó la Resolución 35/13, que establece como tope al precio de los combustibles los valores más altos que se registraban en la plaza local al 9 de abril, las petroleras aprovecharon para remarcar todos los productos, primero un 10 por ciento, luego entre un 3 y 5, dependiendo la marca.

Por otra parte, los avances tecnológicos aumentaron la confianza de los consumidores. El 50 por ciento de los rodados que se pasan a GNC son modernos, con no más de cinco años desde que salieron de fábrica, que instalan sistemas de inyección de quinta generación, los últimos que se lanzaron al mercado.

Otro punto que marca esta tendencia en ascenso en favor del GNC tiene que ver con las garantías de abastecimiento que presenta el gas. YPF y el Gobierno Nacional están dando sus primeros pasos en la explotación de recursos no convencionales en el yacimiento Vaca Muerta. De acuerdo a estimaciones del rubro, esto aseguraría el suministro de gas por 500 años.