Activar/Desactivar Leer Página
ARCA lanzó una nueva herramienta digital para declarar el IVA con un único formulario asistido y precargado. Expertos alertan que las estaciones deben adaptarse cuanto antes para evitar problemas con tickets no precargados y aperturas obligatorias por rubro y alícuota.
Desde el período fiscal de junio, la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ex AFIP) puso en marcha un nuevo régimen para la presentación del IVA: el IVA Simple, un sistema digital y asistido que reemplaza los tradicionales formularios por un único documento unificado, el F.2051, con precarga de datos y un proceso más automatizado.
La medida se oficializó mediante la Resolución General 5705/2025, y se implementará en dos etapas: su uso es optativo hasta octubre, pero pasará a ser obligatorio para todos los responsables inscriptos a partir de la declaración jurada correspondiente a noviembre de 2025, cuyo vencimiento opera en diciembre.

Según detalló ARCA, el nuevo sistema incluye precarga automática de información de ventas, compras, saldos técnicos, retenciones y percepciones, y busca facilitar la presentación mensual del IVA reduciendo hasta un 75 por ciento la carga operativa. A través de tres módulos digitales —registración, determinación y liquidación—, se intenta simplificar el cumplimiento tributario de miles de contribuyentes en todo el país.
Sin embargo, esta modernización exige ajustes inmediatos, especialmente en rubros como el de las Estaciones de Servicio, que deberán revisar su operativa contable.
En diálogo con surtidores.com.ar, Mariana Arca, Gerente de Impuestos de BDO en Argentina, confirmó que el régimen aplica plenamente al sector, siempre que se trate de un responsable inscripto en el IVA. Y advirtió: “Es clave que los estacioneros comiencen a usar la herramienta desde ahora, aunque su uso todavía sea optativo, porque la curva de aprendizaje es importante y en noviembre será obligatorio”.
Un dato relevante para las estaciones es que el sistema no siempre incorpora automáticamente los tickets emitidos con controladores fiscales antiguos, lo cual implica que, si no cuentan con equipos de última tecnología, deberán realizar la carga manual o importar archivos con la información omitida por la precarga.
Además, ya desde junio es obligatorio completar el primer módulo, lo que incluye la apertura del débito fiscal según la actividad desarrollada y por tipo de alícuota, así como la clasificación de las compras también por alícuota y por categoría (bienes, servicios, etc.). Si ese paso no se realiza correctamente, ni siquiera podrá presentarse la declaración por el canal del antiguo IVA Digital.
“Este punto no se puede subestimar. Aunque el sistema parece más simple, requiere más organización interna. Ya hay información que debe completarse sí o sí, y si no se hace correctamente, la presentación es rechazada”, sostuvo la especialista.

Desde noviembre, además, ARCA habilitará nuevas funcionalidades: el sistema traerá de forma automática los saldos técnicos y de libre disponibilidad del período anterior, así como las retenciones y percepciones informadas. Incluso será posible incorporar saldos a favor de otro CUIT, siempre que la normativa lo autorice.
Este avance, interpretado por parte del empresariado como un paso hacia la simplificación tributaria, no sustituye una reforma estructural, pero sí representa una mejora en agilidad y transparencia para sectores muy controlados, como el de los combustibles.
Para la experta, el mensaje es claro: “Cuanto antes se empiece a trabajar con IVA Simple, más tiempo se tendrá para ajustar procesos internos, probar herramientas y evitar errores. La clave está en la preparación previa, no en el apuro de último momento”, sentenció.
DEJANOS TU COMENTARIO!