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Para el exsecretario de Energía de la Nación es “razonable” que tanto la industria como el GNC queden afuera del programa que subsidia a la extracción de gas de Vaca Muerta. Argumenta que son mercados donde hay competencia, a diferencia del residencial.
Para el titular del Instituto Argentino de Energía (IAE) “General Mosconi”, Jorge Lapeña, el Plan GasAr es un programa que “tiene una serie de defectos muy importantes”.
“En principio, no ha sido un concurso competitivo, que demuestre la competencia entre los actores, sino que reflejó una exactitud extraordinaria en los precios ofertados, que varían en uno o dos centavos entre las ofertas. Es decir que partimos desde un concurso amañado, poco transparente”, advierte, en diálogo con surtidores.com.ar.
El exsecretario de Energía de la Nación hace referencia a que todas las propuestas de las empresas que se presentaron a la licitación ofertaron en torno a los 3,6 dólares por millón de BTU. “Coincidieron exactamente con lo que el Gobierno esperaba”, indica.
Y señala: “Es un precio alto si tenemos en cuenta que el mundo en este momento están tranzando contratos a valores por debajo de 3 dólares el millón de BTU”.
No obstante, para Lapeña es “razonable” que el Plan GasAr venga a subsidiar al sector residencial y no al industrial y al del GNC.
“Creo que lo que debe protegerse fundamentalmente son los mercados donde no hay competencia, como los residenciales. En cambio, en los mercados donde sí hay competencia, se debe competir, como en la industria y el GNC”, opina.
En esa línea, el exfuncionario de la Nación observa que “evidentemente va a haber un impacto en los precios” en el surtidor.
Algunas cámaras empresarias que nuclean a estacioneros del GNC advierten que con este nuevo esquema el precio en surtidor podría aumentar un 40 por ciento.
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