Conforme a los reclamos que desde hace mucho tiempo venía llevando adelante la dirigencia del sector expendedor minorista de combustibles, finalmente, con el cambio de gobierno el “costo real” de las naftas y el gasoil se hace sentir en todo el país.

De acuerdo a un primer análisis de la Cámara de Estaciones de Servicio de San Luis, desde que los valores de las pizarras comenzaron a recuperar terreno, se vive de manera inversamente proporcional, la baja del volumen de despacho, que promedia en estas dos últimas semanas un 50 por ciento respecto del mes anterior.

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La cifra puede parecer exagerada, pero parte de la visión del presidente de la entidad José Gianello, quien calculó estos datos tras cotejar con los demás colegas de la región la misma sensación de freno en la afluencia de consumidores a las operadoras de combustibles.

En diálogo con surtidores.com.ar, Gianello señaló que fueron varios los factores que provocaron esta situación de stand by en el comercio de hidrocarburos y citó como el principal la “catarata de aumentos de precios en los productos de primera necesidad”, hecho que se nota también en los minimercados y tiendas de conveniencia de las estaciones.

Por ello, destacó que “al momento de definir en qué gastar, una familia pone como prioridad el alimento y el combustible queda por fuera de las prioridades”. Aunque confía que se trate de un efecto pasajero que obedece a un primer golpe sobre el bolsillo que debería ir tendiendo a normalizarse.

El dirigente detalló además que a pesar de que los precios de los combustibles comenzaron a subir al ritmo que las petroleras están imponiendo, persiste aún la aplicación de cupos de entrega, los cuales no se hacen visibles debido a la depresión en las ventas.

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Por último, Gianello se refirió a una situación particular que los expendedores de distintas zonas de la provincia están atravesando, especialmente aquellos que tienen acuerdos y cuentas corrientes de abastecimiento con organismos estatales, provinciales y municipales. “Por el cambio de gobierno, han sido dados de baja todos los contratos de proveedores y por ende desde la Cámara estamos tratando de reunirnos con los funcionarios tanto para cobrar las deudas de aprovisionamiento que están pendientes de la administración saliente como la posibilidad de encaminar nuevos convenios de carga de combustibles para los vehículos oficiales”, expresó.