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En medio de un nuevo escenario político y económico tras las PASO, el espacio opositor plantea cambios en la política de combustibles y regulación energética.
Después de los resultados electorales del pasado domingo, se vislumbra un horizonte político y económico distinto si los comicios de octubre confirmen la tendencia marcada en las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), lo que podría dar lugar a un cambio significativo en la política de combustibles.
Los asesores técnicos de Juntos por el Cambio, que competirá con Javier Milei por la presidencia de la Nación, están anticipando una serie de modificaciones en la regulación de los precios de los insumos energéticos y el sistema hidrocarburífero en su conjunto.

En este contexto, Emilio Apud, quien ha participado en la formulación de los programas que se implementarían a partir del 10 de diciembre en caso de una victoria de Patricia Bullrich, expresó en una conversación con surtidores.com.ar que “el próximo gobierno deberá hacer cumplir la ley que establece que los combustibles deben tener precios liberados“.
Apud también mencionó su esperanza de que YPF deje de ejercer su papel de regulador de los precios en colaboración con el Estado, y en su lugar, asuma su función principal como empresa exportadora y generadora de divisas.
“En la medida en que los inversores tengan garantías legales para explotar Vaca Muerta, las exportaciones de Gas Natural Licuado (GNL) podrían ser muy prometedoras, lo que permitiría obtener los dólares necesarios para reducir los subsidios a la energía“, comentó el exsecretario de Energía.
Sin embargo, Apud reconoció que una nueva administración asumiría en un escenario más complicado que aquel que llevó a Mauricio Macri a intervenir en los precios de los combustibles a finales de 2018.

No obstante, advirtió sobre la necesidad de explicar al consumidor la importancia de hacer un esfuerzo para “normalizar el suministro y la distribución de los combustibles“, al igual que ocurrirá con los costos de los servicios públicos.
En última instancia, Apud adelantó que “si se cumplen las leyes y el Estado deja de intervenir en un negocio privado, las Estaciones de Servicio recuperarán la rentabilidad que fueron perdiendo durante estas dos décadas de regulaciones, y podrán acceder a precios competitivos sin enfrentar crisis de abastecimiento“.
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