El recibo de sueldo al que accedió surtidores.com.ar, muestra la singularidad de lo que algunos llaman “meritocracia” y otros lo ven como “distribución de la riqueza”, pero que sorprende a propios y extraños por lo que parece ser “el mundo del revés”.

Sin ánimo de cuestionar el ingreso de un trabajador de cualquier actividad, llamó la atención tanto de empresarios pymes de combustibles, como de los especialistas en leyes laborales.

Sucede que algunos medios nacionales publicaron que el salario básico de un recibo de sueldo de un Juez Federal, ronda los 37800 pesos, mientras que el de un playero de Estación de Servicio, se ubica en 41 mil pesos.

Pero el descalabro se produce cuando se empiezan a sumar ítems y adicionales que no poseen ni los empleados de las expendedoras, como tampoco de otras actividades del comercio, los servicios o los profesionales.

Es en ese punto donde los haberes cuestionados de los magistrados y sus jubilaciones, denominadas “de privilegio”, causan conmoción social y el debate que ayer se diera en la Cámara de Diputados.

En el caso de los dueños de Estaciones de Servicio consultados, estos dijeron a este medio que “el desbarajuste de ingresos para la gente que trabaja queda al descubierto en estos temas, porque resulta injusto que quienes aportamos con nuestros esfuerzos privados a un sistema de previsión, sostengamos sueldos de funcionarios estatales que son diez veces más altos que el de un empleado de nuestros establecimientos”.

En ese mismo contexto, el abogado del Sindicato de Empleados de Estaciones de Servicio, Andrés Rodríguez, reconocido laboralista y ex ministro de Trabajo lamentó este déficit institucional que tiene la Argentina y alertó que tiene que haber un sistema universal que establezca los mínimos derechos y que las diferencias para todos los sectores que ganen más en el abanico de remuneraciones tienen que ser iguales para todos.

“No se puede privilegiar una actividad por sobre otra, salvo que la justificación esté basada en razones contundentes sobre el tipo de trabajo, las condiciones de insalubridad, aportes diferenciales y otros detalles”, explicó el experto.

Informó también que este mismo concepto debe trasladarse a las jubilaciones y dijo que un empleado con la mayor categoría de una Estación de Servicio se retira con un haber de 28 mil pesos, muy por debajo de sus ingresos en la vida activa.

“Se trata de derechos laborales y sociales, relacionados con la justicia distributiva y se deben establecer con claridad que si no habrá diferencias, establecerse una jubilación para todos sobre parámetros objetivos, que no beneficien de más a un sector en detrimento de los menos poderosos”, finalizó.