A partir de la publicación en el Boletín Oficial del decreto 107/24, el Gobierno dispuso descongelar los impuestos a los combustibles (ICL e IDL) tras más de dos años sin modificaciones.

De esta manera, se estableció que el aumento del primer y segundo trimestre de 2023 tenga efecto para la nafta sin plomo, la nafta virgen y el gasoil a partir del 1° de marzo de este año. Mientras tanto, los demás incrementos están previstos para el 1° de abril y el 1° de mayo.

En este sentido, ayer la Administración Federal de Ingresos Públicos dio a conocer los nuevos importes, que se ajustan al siguiente detalle:

Según explica el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), la suba que rige desde ayer actualiza el monto del tributo desde $27,7 que tenía el mes pasado a $64,9, es decir, un incremento del 134 por ciento.

El organismo sostiene que dado que hay inflación, resulta importante medir la incidencia de la suba del impuesto en el precio final de la nafta súper. Para hacerlo se actualizaron los valores del impuesto de los próximos tres meses, que sumados al incremento que ya se aplican, permiten calcular un impacto del 17 por ciento del precio final que tenía la nafta el 31 de enero.

Vale remarcar que desde el 1 de junio, los impuestos aumentarán nuevamente por la variación del IPC del primer trimestre de 2024.