Con el avance de las obras del Gasoducto Norte y el respaldo de políticas adecuadas, el GNC se perfila como una opción estratégica en el camino hacia una transición energética más limpia y accesible para los argentinos.

Al respecto, el dirigente de CECHA Pedro Llorvandi, destacó en declaraciones a surtidores.com.ar la importancia de coordinar acciones con el Gobierno Nacional para reactivar el mercado, particularmente en lo que respecta a las conversiones de vehículos livianos y utilitarios. “Necesitamos mostrar y hacer ver nuevamente las cualidades del GNC, el ahorro que implica y su valor como combustible limpio y renovable“, enfatizó.

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El directivo subrayó que, aunque la proyección a largo plazo incluye una expansión hacia camiones y colectivos, el enfoque inmediato debe estar en los vehículos más accesibles para la conversión, como autos y camionetas.

“Lo más fácil y rápido es aprovechar las ventajas que hoy ofrece el GNC“, afirmó, destacando la importancia de fomentar un crecimiento de al menos un 10 por ciento en la cantidad de vehículos que utilizan este combustible en la Argentina.

Para lograrlo, el empresario propuso la creación de una mesa de diálogo entre todas las partes involucradas: fabricantes de equipos de GNC, instaladores, Estaciones de Servicio y el Gobierno Nacional, con la participación de las áreas de Energía, Industria y Comercio. “Es fundamental que estas áreas se sienten a dialogar para implementar un plan de desarrollo del GNC en los próximos tres años”, sostuvo Llorvandi.

El llamado de los estacioneros cobra mayor relevancia con el reciente anuncio de la Secretaría de Energía, que informó que la obra de reversión del Gasoducto Norte ha entrado en su etapa final. Uno de los hitos más críticos, el cruce de Río Tercero, ya ha sido completado, lo que permitirá que el gas de Vaca Muerta llegue a provincias como Córdoba, Salta, Jujuy, Santiago del Estero, Catamarca, La Rioja y Tucumán.

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Esta infraestructura, clave para el desarrollo energético del país, abre la puerta a un aumento en la disponibilidad de gas natural, lo que refuerza la necesidad de políticas que promuevan su uso en el transporte. Según el entrevistado, la reactivación del mercado del GNC no solo beneficiaría a los consumidores con un combustible más económico, sino que también contribuiría a la sostenibilidad ambiental y a la generación de empleo en todo el país.

El impulso del GNC como combustible tiene un impacto directo en la economía y en la reducción de emisiones. “Activar un 10 por ciento de la cartera actual de vehículos que utilizan GNC traería beneficios a lo largo y ancho de todo el país”, finalizó Llorvandi, destacando que la coordinación entre los sectores público y privado es esencial para maximizar este potencial.