El senador nacional por la provincia del Neuquén, Guillermo Pereyra (Movimiento Popular Neuquino), se reunió en Plaza Huincul con trabajadores de las pequeñas destilerías neuquinas que amenazan con cerrar sus puertas por falta de rentabilidad, debido a las desiguales condiciones comerciales e impositivas con las que cuentan frente a las empresas extranjeras, a las que se las exime del pago del Impuesto de Transferencia de Combustible (ITC). Allí informó que pretende que la situación que atraviesan pueda solucionarse a través de la nueva Ley de Hidrocarburos.

Para ello, dijo que está en permanente contacto con el gobernador Jorge Sapag, a quien le acercará una propuesta que contemple las particularidades de esas refinerías en el borrador que presentará la provincia ante sus pares de la Ofephi, para llevar a la reunión con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner la próxima semana,  “porque es un problema de todo el pueblo neuquino“.

El senador y presidente de la comisión de Minería, Energía y Combustibles de la Cámara Alta agradeció al mandatario provincial la invitación “a acercarle todas las propuestas que tenía para llevar un documento conjunto, porque podemos tener diferencias políticas, pero acá no hay diferencias”, aseguró, y señaló la importancia de que la situación de estas pequeñas empresas, “tanto en lo que hace a ITC como al valor del venta del crudo sea incluida en la Ley de Hidrocarburos”, ya que “el refino también es parte de la actividad hidrocarburífera y debe estar incluida en la legislación sobre la actividad”, concluyó Pereyra.

En cuanto a la situación laboral de sus trabajadores indicó que “en cinco días se termina la conciliación obligatoria, y estamos pidiendo que no nos toquen a los trabajadores y la reincorporación de doce despedidos. En caso contrario se va a complicar la producción: la solidaridad de los trabajadores va a hacer que paralicemos todos los yacimientos en las provincias de Río Negro y Neuquén” anunció Pereyra en su carácter de titular del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa.

“Ninguna organización sindical se puede quedar quieta cuando están despidiendo a sus propios afiliados. Yo he transitado todos los caminos, me he reunido con funcionarios de Nación y no he obtenido ninguna respuesta, entonces nos queda el camino de la lucha”, señaló.

Diferencial por zona

Pereyra además viene trabajando en un viejo reclamo de aumento del diferencial por zona que en la empresa de participación estatal llega al 42 por ciento contra el 60 por ciento que pagan las otras refinerías de la región, como Renesa y Petrolera Argentina.

“Tenemos que transitar un camino que nos va a llevar a equilibrar los salarios, que no haya tanta diferencia entre una actividad y la otra”, dijo el dirigente, y mencionó que desde el Sindicato “mantuvimos reuniones con los delegados en Buenos Aires, y en todas hemos recibido siempre una negativa. Pero nos mantuvimos firmes y gracias a eso se llegó a un acuerdo“.