Era reclamada por los expendedores
Diputados aprobó la ley. El texto también determina que la operación no deberá generar mayores costos de las comisiones, ni de transacción, ni de alquiler en los sistemas de captura de transacciones.
La Cámara de Diputados dio media sanción ayer, por 232 votos a favor, 4 en contra y 3 abstenciones, al proyecto que plantea la obligatoriedad para las entidades bancarias y no bancarias de acreditar en forma inmediata a comercios el monto de compras realizadas con tarjetas de débito y prepagas, así como el incentivo a la utilización del débito durante la pandemia.
La iniciativa busca que los comercios minoristas y mayoristas del segmento de las Pymes cobren de manera inmediata las transacciones con tarjetas de débito que pagan los consumidores, ya que la banca y las compañías de créditos las cobran en el acto pero demoran en acreditarlas entre 48 y 72 horas.
El texto también determina que esta medida de acreditación inmediata no deberá generar mayores costos de las comisiones, ni de transacción, ni de alquiler en los sistemas de captura de transacciones. Otro punto clave para su instrumentación en todo el país es que se estableció que esta ley será de orden público.
La iniciativa era insistentemente reclamada por las Estaciones de Servicio. “La medida es una necesidad común de las Pymes y una decisión favorable en medio de esta crisis. Desde FECAC, FAENI y todas las Cámaras y Federaciones que formamos parte de CECHA hace dos años que venimos gestionando para conseguir esto”, afirmó al respecto el presidente de la entidad Gabriel Bornoroni.
La diputada del Frente de Todos y titular de la Comisión de Finanzas, Fernanda Vallejos, indicó que “esta medida representa una contribución importante para el sector, ya que se trata de un importante volumen de operaciones que se realizan con estos medios de pago“.
También sostuvo que el proyecto aporta “un elemento para apoyar a este sector de nuestra economía que viene sufriendo las consecuencias de la crisis económica y, en el último año, el agravamiento de la crisis determinado por la pandemia del coronavirus” y que ayudará a “favorecer una mayor y mejor inclusión financiera, valiéndonos de las oportunidades que ofrecen los avances tecnológicos en nuestros tiempos”.
A su turno, la legisladora radical y titular de la comisión de Comercio, Gabriela Lena, explicó que durante el aislamiento por coronavirus “aumentó un 32 por ciento el uso de las tarjetas de débito”. “Creemos que con esta ley estamos dando una respuesta y una mayor calidad a los pequeños y medianos comercios“, continuó.
Por su parte el diputado del Frente de Todos, Carlos Ponce, autor de uno de los proyectos sostuvo que “al comerciante le debitan entre 4 o 6 días después” de la venta. “El sistema financiero se queda con ese dinero lo cual es totalmente injusto mientras los comercios tienen que hacer frente a recambios de mercadería y pago de sueldos“.
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