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Retirando el efectivo durante la noche, lograron disminuir el delito. ¿Encontraron la fórmula? En gran parte del país analizan este tipo de medidas, a pesar de que utilizar tarjetas de créditos implica un mayor costo operativo. ¿Cómo se puede trabajar el tema? Un caso de éxito.
Las bocas de expendio de Santa Fe sufrían en promedio 2 asaltos por día, muchos de ellos a mano armada y en moto. Hubo casos de agresión y violencia, lo que motivó a la Cámara de Estaciones de Servicio, Garages y Afines de Rosario (CESGAR) y el gremio local a pensar en respuestas de fondo. Las promesas de mayor patrullaje, luego de reuniones con representantes de la policía, no eran suficientes.
Ismael Marcón, Secretario General del Sindicato de Estaciones, reconoce que no permitiendo el pago en efectivo luego de las 22:00 horas, los atracos cayeron sustancialmente, incluso más de lo esperado. “Directamente no roban porque saben que el playero no tiene dinero”, resaltó.
“Era un tema que complicó bastante, durante un tiempo a esta parte, que con la cámara logramos trabajamos muy bien”, reconoce.
¿Por qué en otras zonas no se replica? En principio, los expendedores de combustibles son reacios a ofrecer el pago de naftas en forma financiada, con plásticos, por las altas comisiones que exigen los bancos.
En el caso de los operadores de YPF, cerraron un convenio que logró mejorar la ecuación, por lo que ya analizan esta modalidad, para terminar con el problema de la inseguridad. Hay locales que dividen la isla de carga en función de la forma de cobro: contado y tarjetas.
Están testeando el comportamiento de los consumidores y haciendo cuentas finas sobre el impacto en la rentabilidad. De a poco se van animando, también como atractivo para los clientes, en un contexto de precios competitivos y nivelados entre las marcas.
Además, para muchos consumidores que no circulan con billeteras abultadas, significa una manera rápida y segura de conseguir combustible. Incluso con la posibilidad de pagar en forma financiada se animan a realizar la carga completa del tanque, a pesar de que cuesta por encima de los 600 pesos en todo el país.
La fiscalización por parte de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), exigiendo la existencia del posnet, también colabora en este proceso de sumar tarjetas de débito y crédito.
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