En la actual coyuntura económica de Argentina, las Estaciones de Servicio de GNC se encuentran en una situación delicada, atrapadas entre la necesidad de mantener la competitividad y la presión de los costos fijos crecientes.

En ese sentido, Juan Manuel Rumín, dirigente de la Cámara de Expendedores de Rosario, se refirió a este aumento exponencial de los distintos rubros que impactan en la actividad, como ser transporte y distribución, energía eléctrica y salarios, entre otros puntos críticos.

“La reserva de capacidad se incrementó entre un 620 y un 670 por ciento dependiendo la región del país, mientras que la factura de la electricidad subió un 170 por ciento”, detalló.

ENARGAS ofrece alternativas de abastecimiento para estaciones de GNC

En diálogo con surtidores.com.ar, el empresario afirmó que “estamos en valores cercanos a la referencia del 2016 cuando se liberó el gas en boca de pozo”. Esto había obligado en ese momento, a los estacioneros de GNC a retener el impacto de la suba para no perder competitividad.

En este estado de situación, el gran dilema para las bocas de expendio es decidir entre aumentar los importes al público o mantener los números y sacrificar la rentabilidad. “No poder trasladar costos a precios impacta doblemente ya que lo que no absorbemos perjudica en el volumen de venta y lo que asumimos nos pega en el nivel de ingresos”, explicó Rumin.

Este fenómeno según el directivo, llevó a que la variabilidad de precios en diferentes zonas pueda alcanzar hasta un 30 por ciento.

FUTURO DEL SECTOR Y ESTRATEGIAS DE MITIGACIÓN

Rumín especuló que, a medida que se rehabilite la financiación para equipos nuevos de GNC y se reacomode el precio internacional de la nafta súper, las estaciones puedan adaptarse mejor a la nueva realidad.

“El auge de las nuevas conversiones aún no se hace sentir y habrá que esperar que los resultados de una nueva etapa de desarrollo que se traslade a los surtidores”, comentó. En ese aspecto consideró que la estrategia para el sector implica encontrar un equilibrio entre ajustar los precios de manera sostenible y mantener la clientela fiel, además de buscar apoyo en financiamientos y políticas que alivien la carga de los costos fijos.