Estacioneros entregarán a las autoridades las conclusiones de un relevamiento sobre abastecimiento de combustibles

Si bien a causa de las actualizaciones de los precios las petroleras levantaron los cupos que fijaran a las estaciones de sus redes oficiales de comercialización, todavía queda el universo de más de 800 expendedoras que no tienen contrato con ninguna compañía y sufren las consecuencias de los desajustes de valores y entregas.

Por ello, desde la Confederación de Entidades de Comercio de Hidrocarburos y Afines de la Argentina, no abandonan el trabajo que comenzó para resolver  la crisis que azotó a las Estaciones de Servicio a partir de mediados de este año.

Las ex integrantes de la Cadena Oil, por un lado, las de diferente bandera por otro y en un tercer lugar, las “blancas”, enfrentaron con diferentes matices la falta de combustible que les provocó algunos inconvenientes y en muchos casos, pérdidas importantes de facturación y con ello de rentabilidad.

Guillermo Lego, Gerente de CECHA, comentó a surtidores que la coyuntura económica actual y los aumentos de precios provocaron que las estaciones de bandera estén siendo abastecidas normalmente, mientras que el compromiso judicial asumido por DAPSA e YPF, solucionó el abastecimiento para las operadoras del ex Grupo Indalo.

“Estamos finalizando la encuesta para entregarle los datos al Ministerio de Energía con aquellos establecimientos que más inconvenientes tuvieron en recibir producto durante los meses de crisis”, sostuvo, al tiempo que agregó: “En dicho informe también figuran las estaciones blancas y algunos colegas más específicos que aún hoy no tienen asegurada la nafta y el gasoil para revender”.

Recalcó el contacto permanente de los dirigentes de la entidad con los representantes de DAPSA, “que siguen atentos a todos los inconvenientes que puedan quedar en los establecimientos que están más aislados de centros urbanos y a disposición de nuestros requerimientos las 24 horas del día, con la mejor buena voluntad”, dijo.

Vale recordar que si bien los nuevos precios provocaron que las petroleras liberaran producto para la venta, se dio un importante incremento del valor para el canal mayorista con lo cual, aquellas estaciones que no tienen línea directa con las compañías y deben abastecerse de distribuidores independientes, se ven en la situación de tener que vender el combustible a un precio mucho más elevado que sus competidoras oficiales, situación que pone en riesgo su continuidad comercial y la estabilidad laboral de los empleados de estas bocas de expendio.