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Las Estaciones de Servicio enfrentan una serie de desafíos económicos y jurídicos derivados de la histórica complejidad impositiva vigente en Argentina. Tributaristas coinciden en que la superposición de obligaciones afecta el derecho de “Propiedad Privada”.
En varias oportunidades, los titulares de bocas de expendio, a través de las diversas cámaras representativas, elevaron peticiones a los gobiernos de diferentes provincias, justificando la distorsión que sufren con una permanente generación de saldos a favor en el Impuesto sobre los Ingresos Brutos, lo que lleva a tener importantes sumas inmovilizadas.
En su momento los empresarios sostuvieron que esta situación no solo supone obtener mayor capital de trabajo, con el costo financiero que ello implica, sino además, en muchas oportunidades, la imposibilidad que puedan hacer retiros a cuenta del resultado de su explotación.

En ese marco de reclamos históricos, los operadores afirmaron que sobre la comercialización minorista de combustible recaen, a la vez, varios regímenes de recaudación establecidos por los entes provinciales, como ser, el de percepción sobre las compras, el régimen de retención sobre las liquidaciones de tarjetas de débito y crédito, y el régimen de percepción sobre acreditaciones bancarias.
En este contexto, el contador público Marcos Felice, expresó a surtidores.com.ar, su preocupación por la situación que atraviesan los estacioneros, especialmente en relación con el impuesto a los Ingresos Brutos y el polémico Sistema de Recaudación y Control de Acreditaciones Bancarias (SIRCREB).
Recordó que el informe de la UIA revela una realidad alarmante: el 57 por ciento de los saldos a favor de Ingresos Brutos que las provincias adeudan a las empresas corresponden a jurisdicciones donde estas no tienen establecimientos. Más aún, el 77 por ciento de quienes solicitaron devolución o reintegro no lograron conseguirlo, y el 95 por ciento de las firmas no puede compensar estos fondos. “Esta situación desencadena una tasa efectiva del impuesto que puede llegar al 4 por ciento, afectando gravemente el capital de trabajo de los estacioneros”, observó el experto.
Felice sostuvo que el problema se agrava con la superposición de impuestos provinciales y otros gravámenes como el impuesto al cheque y el SIRCREB. Este último, regulado por la Resolución General Nº 104/2004 de la Comisión Arbitral del Convenio Multilateral (COMARB), ha generado controversia y litigiosidad en el sector. Según el analista impositivo, algunas provincias imponen condiciones complicadas para la recuperación de los saldos a favor, lo que afecta el derecho de propiedad privada y desfinancia a los contribuyentes.

Como “caso testigo”, tomó la disputa judicial de “ADECO AGROPECUARIA SA c/ COMISIÓN ARBITRAL DE CONVENIO MULTILATERAL” el que según su visión ejemplifica la complejidad y la controversia que rodea al SIRCREB. “La empresa demandante cuestiona la constitucionalidad de este sistema y solicita la devolución de las retenciones realizadas en sus cuentas bancarias. El fallo judicial destaca la desproporción de las retenciones realizadas en la provincia de Santa Fe, sugiriendo la exclusión de la empresa del régimen de recaudación”, comunicó Felice.
De esta forma, el entrevistado aseveró que los estacioneros enfrentan una situación de incertidumbre y desafíos económicos que afectan su capacidad para operar y generar ingresos. “Es imperativo encontrar soluciones que respeten el derecho de propiedad privada y que no desfinancien a los contribuyentes, promoviendo un diálogo constructivo entre todas las partes involucradas. La estabilidad y el desarrollo de las Estaciones de Servicio son fundamentales para garantizar el abastecimiento de combustible en todo el país”, finalizó.
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