La industria automotriz perfecciona el diseño de los motores de forma permanente para mejorar su rendimiento y disminuir el impacto ambiental. YPF trabaja activamente para estar a la vanguardia del adelanto tecnológico y acompañar con la calidad de sus combustibles el desarrollo de la industria y el requerimiento de los clientes.

Así lo explica el Gerente de Servicio Técnico, Ingeniero José Luis Durán, a través de un didáctico video presentado recientemente por la petrolera denominado “Trazabilidad”.

“Desde el clima frío el sur hasta el extremo hasta el calor extremo del norte es fundamental que la calidad de los combustibles permanezca siempre igual. Para garantizar sus óptimas cualidades en todos los lugares de carga, YPF cuenta con una red de distribución que se extiende desde sus tres refinerías hasta los 1500 puntos de venta presentes en todo el país”, comienza relatando el especialista.

En las refinerías las naftas reciben una primera certificación de calidad. Mediante poliductos y barcos llegan a las terminales de despacho donde se realiza la segunda certificación antes de su distribución capilar a las estaciones de servicio. En esta etapa del proceso el combustible está totalmente formulado con agentes especiales que permiten tener limpio el sistema de inyección del vehículo.

Pero, ¿como se controla la calidad en cada estación de servicio? “La descarga del combustible desde el camión a los tanques de almacenaje sigue procedimientos específicos y la Gerencia de Servicios Técnicos realiza auditorías permanentes a través de 10 laboratorios móviles que se encargan de controlar la calidad del producto, el adecuado funcionamiento de los surtidores y los tanques de almacenamiento”, sostiene Durán.

YPF es la única compañía petrolera de la Argentina que cuenta con tres refinerías con procesos de refinación del petróleo de última generación tecnológica, donde se produce aproximadamente el 58 por ciento de las naftas y los diésel del país.

Esta infraestructura de punta y la permanente inversión en tecnología le permiten obtener, a partir de procesos químicos y físico-químicos, los mejores combustibles sin necesidad de recurrir a aditivos que dañan el medioambiente.

“Detrás de cada producto hay investigación, desarrollo y un profundo compromiso por asegurar la calidad, el mejor desempeño y el cuidado del medioambiente”, aseguran en YPF.