En un año el consumo de gasoil cayó 87 millones de litros

El mercado de los combustibles argentino tiene una dinámica inusual como pocas otras actividades de la economía. Se adapta a las necesidades del momento con gran agilidad sin perder de vista el verdadero objetivo del negocio. Así surgió en su momento el GNC y posteriormente el furor del diesel en los automóviles, un escenario que hoy vuelve a modificarse con el resurgimiento de las naftas.

Es que son cada vez más los vehículos que utilizan este insumo mientras que el gasoil pasó a estar reservado a los utilitarios y a los de gran porte. Lo confirman datos de la Secretaría de Energía, que asegura que la demanda de sus dos variedades retrocedió 87 millones de litros durante el último año.

Los números oficiales afirman que en abril se consumieron 1.050 millones de litros de Gasoil grado 2 y 86 del tipo Premium, mientras que un año antes la primera especie superaba los 1.118 y la segunda 105 millones. En la caída, especialmente del Ultra, mucho tuvieron que ver las limitaciones a las importaciones, pero la tendencia indica la definitiva segmentación del mercado.

Actualmente nueve de cada diez autos que se venden en la Argentina son nafteros. Esto significa que desde 2002 hasta hoy hubo un incremento de las ventas de estos vehículos de 938 por ciento, mientras que las de vehículos diésel (tuvieron su auge desde fines de los años 90 y hasta la salida de la convertibilidad) tan sólo aumentaron el 36 por ciento.

Los especialistas adjudican los motivos a la disminución de la brecha entre el precio de de uno y otro combustible pero también incide la calidad del gasoil local que baja el rendimiento del auto. La poca rotación incluso se nota en las concesionarias que ya ni aceptan los modelos usados gasoleros en parte de pago de un cero kilómetro.

Rápidos de reflejos, algunos estacioneros ya están reemplazando los surtidores diesel por otros que despachan sólo naftas. Explican que los tanques permanecen ociosos y prefieren utilizarlos para los productos de mayor consumo. Incluso revelan que sus proveedores les limitan las compras de gasoil y no tanto las de naftas así que eligen hacer uso de esa ventaja competitiva para mejorar su rentabilidad. 

El mercado de gasoil estuvo liderado en abril por YPF con el 55 por ciento de las ventas, 632 millones de litros, seguida por Esso, 180; Shell, 151; Oil, 66 y Petrobrás, 65 millones.