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Tras la noticia que impactó recientemente al mercado de los combustibles, referida a una serie de robos en oleoductos de la petrolera estatal, surge con más fuerza la opción de las marcas “Low Cost” para brindarle a las actuales estaciones blancas un marco de confianza y previsibilidad.
Como se diera a conocer en los medios recientemente, la justicia nacional investiga a una supuesta organización ilícita que se dedicaba a extraer petróleo de los ductos de YPF, para refinarlos primero y revenderlos luego a través de canales ilegales.
De esta forma, el sector de las Estaciones de Servicio Blancas, pone nuevamente en el centro del debate, la importancia de acudir a las nuevas banderas denominadas “Low cost” con el objeto de adquirir una imagen y una estructura de operaciones que garanticen al empresario y al consumidor datos certeros sobre la trazabilidad del combustible que se expende en los establecimientos.
Por ello, el gerente de Líder Oil, Sebastián Barinaga, recordó que “la intención de nuestro negocio en brindar a través de un contrato amigable y accesible para el estacionero que por diferentes motivos particulares no pudo mantener sus compromisos de marca con las principales petroleras, una alternativa de embanderamiento que reavive la relación con los proveedores y con los consumidores de la comunidad donde están emplazadas las bocas de expendio”.
En ese contexto, el ejecutivo afirmó que “buscamos que el expendedor pueda recuperar su rentabilidad, brindando el servicio social en localidades donde las compañías no están interesadas en participar pero los habitantes de esas zonas necesitan de la Estación de Servicio”.
De esta manera, se soluciona la actividad cotidiana, asegurando a través de esta marca a bajo costo de mantenimiento que contempla la situación integral de cada cliente, la garantía sobre el origen y la calidad de los productos que venden en el surtidor.
“Resulta muy común en el mercado blanco que aparezcan revendedores de los denominados `con valija´, ofreciendo nafta o gasoil a precios diferenciados, pero con muchos interrogantes no resueltos al momento de brindar certezas referidas a su origen o calidad”, dijo Barinaga.
Este modus operandi, sumado ahora al descubrimiento de organizaciones delictivas que se dedican a la venta mayorista de combustibles, abre la puerta para que los operadores sin bandera, tengan una posibilidad de adquirir seguridad y amparo sobre el producto que ofrecen al público y las condiciones en las cuales lo adquieren.
En ese aspecto, el gerente de una estación blanca ubicada en la Ruta 8 que decidió adoptar la marca Líder Oil, Benjamín Lazzarino, destacó que “la propuesta nos convenció porque es una empresa nacional con sentido de pyme que ofrece cobertura a nuestro negocio con requisitos y exigencias accesibles muy por debajo de las grandes petroleras”.
El mismo Lazzarino, informó a este medio que “de manera cotidiana recibimos visitas de distribuidores quienes nos ofertan producto para revender a precios un poco más bajos de los conseguidos en el mercado, pero no muestran ningún tipo de reaseguro o tranquilidad sobre la manera en que se consigue y otros detalles que generan un seguimiento de la operación”.
En ese contexto, se mostró conforme por comenzar el desafío de formar parte de una cadena de expendedoras pymes con marca nacional y una imagen que se impone en la zona donde opera desde hace muchas décadas.
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La petrolera de bandera comunicó a surtidores.com.ar que “se destaca el trabajo de las autoridades que llegaron a este resultado, porque la compañía colaboró en todo momento durante la etapa de investigación desde el área interna que gestiona Diego Gorgal, para que hoy se vieran los resultados positivos del trabajo conjunto que llevo más de tres meses”.
Aseguran que “se trató de un hecho ilícito que lleva más de dos años y que luego de un trabajo de tres meses con las autoridades judiciales, se pudo llegar a la luz y descubrir a los supuestos autores”.
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