El Plan GasAr podría desincentivar la participación de las petroleras en la venta de gas a sus operadores de red

A mediados del 2017, la Secretaría de Energía permitió a las compañías petroleras incrementar su participación en la venta de gas para las Estaciones de Servicio de GNC.

Esta habilitación generó resquemores, por un lado, en las comercializadoras, ante la emergencia de un nuevo y poderoso competidor y por el otro, entre los mismos estacioneros, que veían con recelo el hecho de quedar como “clientes cautivos” de sus empresas de bandera.

Sin embargo, con la reciente aplicación del Plan GasAr, y la falta de señales claras sobre el precio del gas para las Estaciones de Servicio de GNC, el interés de las petroleras por seguir participando de este negocio está mermando.

En diálogo con surtidores.com.ar, Juan Manuel Rumin, dirigente de FAENI, señaló: “El Plan Gas provocó tal incertidumbre que todavía ni los expendedores ni las petroleras tienen un precio de referencia que les permita tomar decisiones más allá de abril”, momento a partir del cual quedará desregulado el mercado de gas para las expendedoras.

El especialista recordó que para esta época ya estaban todas las ofertas de gas en boca de pozo sobre la mesa, lo que permitía a todos los integrantes de la cadena de GNC tomar decisiones para el resto del año. “Ahora nadie tiene noción de precios ni valores”, lamentó.

En esa línea, opinó que las petroleras se encontrarán en una disyuntiva teniendo en cuenta que este año el volumen de gas será escaso: Vender gas a sus operadores de GNC a un precio negociado o a otros actores de la economía que quizá estén dispuestos a pagar más dinero.

PRECIOS POR LAS NUBES

No obstante a ello, Rumin señaló que el índice de precios que se obtuvo en la última licitación de gas para el invierno enciende luces de alarma.

“Los expendedores pasamos de pagar 2,10 dólares por millón de BTU a encontrarnos con la última subasta que puso el precio de 3,56 dólares por millón de BTU”, alertó el especialista.

Agregó que en este contexto, el precio en los surtidores deberá ser incrementado en abril por lo menos un 70 por ciento, con todas las consecuencias negativas que acarrearía este aumento para todos los usuarios de GNC.

Aseveró que si el Estado no se compromete en brindar directivas claras e intermediar a través de IEASA la provisión de gas con precios más bajos, “será inviable el negocio, tanto para estaciones como para petroleras”, sentenció.