Con más de 1.700.000 vehículos convertidos, el GNC sigue consolidándose como el combustible alternativo más importante del país. Así lo confirman los datos oficiales provistos por el ENARGAS, que afirman que en enero, los traspasos a gas crecieron 9.6 por ciento en comparación con el mismo mes del año anterior.

“El nivel de actividad se mantiene”, sostiene el Vicepresidente de la Cámara de Expendedores de Gas Natural Comprimido, Pedro González, en diálogo con surtidores.com.ar. “Las Estaciones de Servicio conservan su caudal de ventas pese a que el precio de las naftas está congelado hace más de dos meses”, confirma.

Actualmente el metro cúbico de gas vehicular promedia los 26 pesos, menos de la mitad que un litro de súper. “Pero cuando este último se libere la brecha seguramente será mucho más amplia”, pronostica el directivo de la CeGNC.    

La excepción es la Ciudad de Buenos Aires, donde la diferencia se estira a casi el triple. “En Capital y Gran Buenos Aires siempre estamos complicados y esto se debe a la guerra de precios que hay. En nuestra zona el GNC se vende más barato que en las provincias, a pesar que nos cuesta más comprarlo”, manifiesta con preocupación González.

Advierte que hay empresas que lo están vendiendo por debajo de la línea de equilibrio. “Estamos de acuerdo con que haya libertad para decidir a cuanto se debe ofrecer, pero ese tipo de políticas de algunos estacioneros terminan siendo perjudiciales para todo el sector en general”, apuntó.

De acuerdo al informe del Ente Regulador, Corrientes se ubica como la provincia más cara en materia de gas vehicular: $ 31.99. Le siguen Entre Ríos, $30; La Rioja, $29.99 y San Luis, $28.49. En el otro extremo, después de CABA, se encuentran Tierra del Fuego, $22; Neuquén, $22.89 y San Juan, $23.02.