Opinión: El futuro de los precios de combustibles en un contexto de elecciones

Cristian Folgar, experto en energía y ex Subsecretario de Combustibles durante la presidencia de Néstor Kirchner, analiza el porvenir de la actividad en un escenario marcado por pequeños ajustes de valor en las estaciones de servicio, con YPF aventurada en Vaca Muerta y el petróleo asentado en torno a los 60 dólares.

¿Es de esperar mayores ajustes de precios luego de diciembre?

Seguramente, en la medida que la inflación evolucione o haya modificaciones en el tipo de cambio nominal es de esperar que se modifiquen los precios de las naftas o gas oil en las estaciones de servicio. Asimismo si variara el precio de transferencia del crudo entre los productores y las refinerías (hoy en 75 dólares) también podría cambiar el valor en el surtidor. No creo que el gobierno modifique el precio de transferencia antes de fin de año salvo que decida hacerlo como medida para juntar votos.

¿Cómo van a evolucionar los precios antes y después de las elecciones?

Mi visión es que la política energética del ganador la vamos a conocer después del 11 de diciembre, no creo que nadie de muchas precisiones antes de las elecciones.

Más allá de las variables en el mercado interno ¿Cómo afecta el contexto internacional?

En el mercado internacional no se esperan fuertes variaciones de precios hasta fin de año, salvo que se produzca una aceleración en la apreciación del dólar en cuyo caso podría esperarse una baja nominal del valor del crudo medido en dólares.

¿Y la necesidad de inversión de YPF en Vaca Muerta?

YPF no va a conseguir inversiones efectivas de significación en lo que queda del año. Quizás (ojalá) firme algunos acuerdos donde se puedan dar buenos anuncios. Hasta diciembre serán muchas palabras y poca plata. Luego, en función de lo que haga el próximo gobierno se decidirá.

¿En qué valor debería ubicarse el litro de nafta súper?

Si no hubiera intervención debería bajar. Si el crudo se comercializara internamente a 60 dólares en lugar de 75, ese 20 por ciento de baja podría implicar en el surtidor cerca de un 15 por ciento. El problema es que si se tomara esa decisión bajaría la actividad en las provincias y quizás debamos importar más energía en un momento de escasez de divisas. No veo muy probable el escenario de baja del crudo antes de diciembre salvo por cuestiones electoralistas. Luego de diciembre mucho dependerá de la política energética de la nueva administración.