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La radicó un expendedor titular de una estación de GNC por sanciones que le aplicó al establecimiento sin ajustarse a la normativa. El empresario asegura que el inspector rechaza la instalación de compresores sin bunker como el que allí funciona. Es la primera vez que ocurre una situación de estas características.
Una estación de servicio de GNC fue clausurada por un inspector de la Distribuidora Camuzzi Gas Pampeana, argumentando problemas de seguridad en las instalaciones. La medida fue severamente cuestionada por el titular del establecimiento, quien rechazó las imputaciones del agente y a la vez lo denunció penalmente por incumplir deberes de funcionario público.
El caso, que no registra antecedentes en nuestro país, ocurrió en la localidad de Chivilcoy, en una boca de expendio de la empresa Argas. Según explicó el titular de la firma, Dr. Martín Matzkin a surtidores.com.ar, el motivo es sencillamente que al auditor “no le gustan los compresores sin bunker”.
La estación cuenta con una máquina del tipo Nanobox, que ha sido diseñada para operar sin una edificación que lo contenga. Además por cuestiones comerciales, (atiende un solo playero) solo despacha una sola manguera. “Estos motivos fueron suficientes para que se decrete que no podíamos seguir vendiendo en estas condiciones”, explicó el empresario.
“Todo comenzó porque no funcionaba una lámpara, luego se le sucedieron otras cuestiones sin importancia y la frutilla del postre fue que no contábamos con el estado patrimonial de la empresa que nos brinda el seguro de caución, una dato que no tenemos ninguna obligación de tener”, se quejó Matzkin.
Tras solucionar los puntos exigidos por el agente, la boca de carga volvió a funcionar por la noche. Sin embargo Matzkin, lejos de relajarse por la habilitación tomó la decisión de denunciarlo ante el Ente Regulador y la justicia.
“Considero que existe una causa adicional que es nuestra decisión de estimular los despachos a través de una promoción”, agregó. Se trata una acción que ofrece un precio diferenciado a las mujeres que concurren a cargar, que impulsó las ventas a límites insospechados. “Sin dudas la Distribuidora no debe estar contenta con que aumentemos las ventas de GNC”, arriesgó el operador.
Matzkin finalmente reveló una anécdota que grafica el accionar del inspector, a quien atribuye tener “animosidad negativa” contra la actividad: “Cuando inauguramos la estación con este búnker, la primera observación que nos hizo es que al no tener contención de una obra civil el dispositivo no se ajustaba al arte”.
Y con ese compresor de jugete queres aumentar la venta, dejate de joder Dr Matzkin.
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