Daniel Añón: “Estamos satisfechos con la quita de la tasa de inflamables pero hay que mirar otros gravámenes”

La reciente baja de los combustibles en Uruguay, impulsada por la resolución de la Suprema Corte de Justicia que consideró la “tasa de inflamables” que cobraba la intendencia de Montevideo era inconstitucional, más allá de la significancia porcentual, (en promedio 20 centésimos), colocó el tema de las tasas, los impuestos, y los gravámenes sobre este producto refinado, en una nueva discusión nacional del sector.

A pesar de que el juicio fue ganado por la empresa DUCSA (ANCAP) que ya dejó de pagar a la comuna capitalina, se sumaron –como se anunció en Surtidores- las otras distribuidoras, AXION y DISA, que cedieron el monto de la baja de sus márgenes en una lógica medida comercial, igualando el precio en el surtidor de los tres sellos.

AXION ANALIZA JUICIO

Las consecuencias del dictamen de la SCJ, son por el momento inesperadas. Ahora ANCAP analiza ir hacia atrás en el reclamo, situación que está manejando con sus servicios jurídicos.

A su tiempo, AXION y DISA –que como se decía ya procedieron con la baja a su costo- analizan la situación para ver cómo seguir y eventualmente entablar juicio a la comuna, a sabiendas que están pagando una tasa considerada “inconstitucional”.

Fuentes de AXION informaron a Surtidores que la compañía “está definiendo plazo para presentar recurso por tema tasa inflamable, y en las averiguaciones respecto a una potencial retroactividad de fallo”.

De hecho, si bien el gravamen representa unos 20 centésimos por litro, lo que lo coloca como de poca significancia para el PVP, para el caso de las distribuidoras que manejan millones de litros mensuales, la sumatoria sí representa y ha representado, sumas considerables que naturalmente, a partir de esta decisión de la SCJ, es lógico esperar se replique para las tres distribuidoras, y dejen de pagarlo, así como eventualmente revisen el alcance retroactivo del mismo.

DANIEL AÑÓN “SE TERMINÓ CON UNA INJUSTICIA”

Daniel Añón, presidente de UNVENU, consultado por Surtidores, se mostró satisfecho por la reciente medida porque “toda baja que se pueda trasladar a la gente es bienvenida. Además termina con una vieja injusticia reclamada por el interior del país, que debían asumir este impuesto, solamente percibido por la intendencia de la capital, con el agravante que –según la SCJ- no se ofrecía contrapartida” señaló.

“De todos modos, creo que el combustible hoy se encuentra gravado con otros ítems que sí realmente impactan en su precio y que eventualmente podrían rebajarse o quitarse” sostuvo el presidente de la gremial de estacioneros a Surtidores.

IMESI EL DE MAYOR PESO

Para Añón –en el caso de las gasolinas- el gravamen de mayor incidencia es el IMESI, un impuesto creado en el primer gobierno del Dr. Tabaré Vázquez sobre las naftas. “En Uruguay, el IMESI y el CO2, representan el 37.15 por ciento de su costo en el surtidor (muy por arriba de la media internacional), aunque debe señalarse que en el continente americano ostentamos la posición de tener los impuestos más caros para las gasolinas” apuntó.

En otra parte reveló que por cada litro de gasolina que se vende, “12.29 pesos corresponden al impuesto de CO2 (17 por ciento) y 19.77 pesos lo gravan por concepto de IMESI (27,50 por ciento). Ambos totalizan más de 32 pesos por cada litro surtido en Uruguay”.

COMBUSTIBLES EL MAYOR APORTE AL IMESI Y CO2

Al Impuesto Específico Interno, desde el 1ro. de enero de 2022, se agregó el “Impuesto Específico al C02”, aunque en rigor según Añón, “no hubo un aumento sino que el IMESI cedió un porcentaje al nuevo impuesto, que se regula por el Título 11 del Texto Ordenado de 1996, que grava la primera venta a cualquier título de determinados bienes;  los combustibles, entre otros”.

Pero para el directivo de UNVENU, actualmente sobre el combustible pesan otros impuestos y sobrecostos que en definitiva suman para la cuenta del PVP, como la subvención al supergas, al cemento portland y biocombustibles o el fideicomiso al boleto en el caso del gas oil “cargas fiscales que sin duda son las causa principal del alto costo de los combustibles en Uruguay” sentenció Añón.

“Personalmente creo que el fideicomiso al boleto es algo muy importante sobre todo para la población que carece de un automóvil y se debe mover en el servicio de transporte capitalino, pero también creo que este concepto, debería ser incorporado a otros rubros y no al combustible. Véase que quitando este fideicomiso, Uruguay se equipara al resto de los países de América en materia de precio del gas oil” concluyó el presidente de UNVENU.