Cuestión de precios: Por las grandes distancias, a los habitantes de la Patagonia se les dificulta el desplazamiento

Moises Solorza, especialista en temas hidrocarburíferos, destacó que “el aumento de los combustibles seguirá siendo un problema el año que viene” y agregó que “el gobierno nacional traslada todos los costos de las petroleras a los consumidores y deja a las Estaciones de Servicio sin beneficio alguno”.

El entrevistado agregó que “las compañías refinadoras se niegan a acomodar el precio internacional del crudo a los valores a surtidor y asumir el desfasaje de los costos que los hidrocarburos tuvieron en estos tres años de gestión de Cambiemos”.

Criticó que desde el Estado no tengan las herramientas para defender a los consumidores en un insumo fundamental para el desarrollo de cualquier actividad económica como el combustible.

El referente de los sindicatos petroleros, alertó que existe la oportunidad de bajar las naftas un 5 por ciento y solamente lo bajan un 1 y en el gasoil, las condiciones hoy en día están dadas para una rebaja del 4, pero decidieron aumentarlo.

Aseguró que los incrementos no guardan relación con los salarios de los clientes, que además enfrentan la injusticia de las tarifas de servicios públicos, con lo cual, las autoridades no cumplen con la mirada social inclusiva que debe tener para resguardar la soberanía.

En este contexto, Solorza compartió una investigación realizada en la Provincia de Tierra del Fuego, sobre cuánto va a costar viajar en auto a Córdoba, Buenos Aires, Tucumán y la costa en las vacaciones de verano. “Una familia tipo en un automóvil de 1400 cm3 de cilindrada, deberá gastar casi 14 mil pesos solamente en combustible, para llegar hasta la Costa, sin contar los peajes y otros gastos, pero lo mismo deberá asumir para volver de sus vacaciones”, detalló.

Asimismo puntualizó que “para que una persona pueda llegar a Tucumán a visitar a sus parientes, deberá invertir un total de 35 mil pesos solamente en nafta, ida y vuelta”.

A este tema, el estudioso de temas patagónicos, se quejó porque también, las Estaciones de Servicio en su mayoría, no aceptan tarjetas de crédito, lo cual provocará que solamente los “privilegiados puedan tomar vacaciones muy lejos de sus lugares de residencia”.