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Mientras que en la media nacional, YPF cuenta con el 32 por ciento del total de estaciones de servicio, en provincias como Salta y Chubut la empresa concentra casi el 50 por ciento de los surtidores. En Buenos Aires y Capital Federal uno de cada tres establecimientos lleva su marca como en la mayoría de los distritos
Mientras las petroleras mantienen en casi todo el país el mismo porcentaje de participación de mercado, para el caso de YPF hay algunas zonas donde su importancia es notoriamente mayor, debido a que históricamente llegaba a los lugares más recónditos de
YPF posee la única red de estaciones de servicio de 1.600 puntos en todo el país, certificada en gran parte por la norma de gestión de la calidad ISO 9001 y de gestión medioambiental ISO 14.001. De ese total, alrededor de 1.320 son líquidas (Naftas+Gasoil), casi 300 son duales (Naftas y Gasoil + GNC), mientras que alrededor de 60 son de GNC solamente.
En las provincias de Chubut y Salta, es decir en los dos extremos del territorio nacional, la marca ha conquistado el 47 y 45 por ciento del total de estaciones de servicio respectivamente. Como muchas petroleras no consideraban un gran negocio instalar bocas de expendio en regiones con escaso movimiento económico, la ex petrolera nacional hizo pie firme con el fin de proveer combustibles a localidades con poca población y zonas rurales dependientes de economías solidarias.
Salvo YPF y Shell (aunque suenan versiones de una posible salida del país), el resto de las compañías atraviesan un proceso de mutación comercial que modificó su participación en el mapa de los surtidores. Una de ellas es Petrobras, que meses atrás dominaba el 13 por ciento del total de puntos de ventas de combustibles, ha vendido 340 de sus 572 estaciones a Oil Combustibles, reduciendo su participación a menos del 5 por ciento. De esta manera, la compañía del Grupo Indalo opera el 8 por ciento del total de la bocas.
En el caso de Esso, otra de las petroleras históricas, ha cedido a Pan American Energy sus 476 estaciones de servicio que tenía distribuidas en todo el territorio. Tras la transferencia de activos, el grupo Bridas tendrá en su poder el 10 por ciento de los puestos de venta de naftas.
Los últimos cambios de manos evidencian que la actividad no transita un momento de esplendor. En este contexto el crecimiento de las estaciones de servicio blancas es muestra de ello, y a la vez, la comprobación que hay una importante tendencia de las marcas a rescindir los contratos comerciales con los expendedores. Según informaron desde
En Mendoza, por ejemplo, 4 de cada 10 estaciones que se encuentran en la provincia no tienen relación con ninguna petrolera y deben abastecerse en el mercado local pagando precios muy superiores al que consiguen las embanderadas.
Los datos hacen referencia a la cantidad de establecimientos y no así al volumen de naftas, gasoil o GNC que cada marca vende. En este sentido, se puede asegurar que las bocas de las petroleras de red concentran una porción muy importante del mercado, pese a ser muy pocas en relación al total que tiene el país.
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