¿Cual fue la provincia que más creció en ventas de naftas durante el año?

Un emprendimiento de la magnitud de una estación de servicio merece un análisis pormenorizado sobre sus potencialidades, especialmente en este escenario tan cambiante como el argentino. Donde conviene instalarla es quizás el principal interrogante, sin embargo, un relevamiento acerca de como se desarrolló el mercado de las naftas al público durante este año pueden ayudar a definir la respuesta.

Según a datos provistos por la Secretaría de Energía, Neuquén fue la provincia de mayor crecimiento interanual en consumo de naftas. En efecto, comparando lo sucedido en las bocas de expendio de la región los diez primeros meses del año 2013/14, surge que la demanda de Súper y Premium se amplificó 5.7 por ciento. Los motivos: el fenomenal desarrollo de la industria petrolera potenciado por la exploración del yacimiento no convencional de Vaca Muerta.

Santiago del Estero, Formosa y Catamarca, son las que siguen en la lista, todas con subas superiores al cinco por ciento en tanto que Corrientes y Jujuy las acompañan de cerca, dejando en claro que las zonas del país menos densamente pobladas de vehículos fueron en definitiva las de mayor expansión.

Para corroborar esta afirmación bien vale señalar lo ocurrido en las principales provincias argentinas: el consumo de naftas se redujo en Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe, mientras que en Mendoza y en la Patagonia se mantuvieron en una meseta respecto al mismo período del año anterior.

De este análisis se desprende que la demanda de combustibles en las grandes urbes parece haber encontrado su techo. Al menos en este contexto económico caracterizado por la marcada recesión que impactó en el bolsillo de los consumidores. Por el contrario, se deduce que las de menor cantidad de habitantes aun tienen mucho espacio para progresar.

A pesar de esta nueva realidad, la búsqueda de las petroleras está enfocada en las capitales y ciudades de más de 400.000 habitantes. No solo por su presencia institucional, es que en términos absolutos el volumen despachado por los establecimientos ubicados en estas localidades supera con creces a los del interior. De ahí se explica la proliferación de las bocas blancas en zonas alejadas de los grandes centros urbanos.