Capacitación: Consejos para la agenda de ambiente en Estaciones de Servicio

En un contexto donde las exigencias regulatorias se entrelazan con una incipiente toma de conciencia sobre la sustentabilidad, las Estaciones de Servicio están comenzando a invertir de manera más decidida en soluciones que mejoren su desempeño ambiental.

Desde estudios de suelo hasta la gestión integral de residuos peligrosos, el sector va dando pasos firmes para revertir viejas prácticas que históricamente consideraban estos temas como un gasto y no como una inversión.

El aumento de diagnósticos técnicos sobre suelos y napas permitió determinar el grado de pasivo ambiental acumulado. Tal como explicó Gerardo Parino, Director de Parino Group, esto permite “obtener una radiografía de la situación” e implementar soluciones anticipadas.

Contaminación de suelo con combustibles: ¿Sólo la Estación de Servicio es responsable?

La fiscal general Gabriela Boquin intervino en una demanda interpuesta por la firma propietaria de un predio donde funcionaba una boca de expendio, a fin de obtener la remediación del daño ambiental generado por la filtración de hidrocarburos al terreno y las napas de agua.

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“Por eso, invertir en diagnósticos y remediación es también una forma de reducir costos a largo plazo”, detalló y añadió que, en este sentido, la firma marca su competitividad por su experiencia y articulación con sus cinco áreas especializadas orientadas a cubrir todas las exigencias técnicas que hoy enfrenta una estación: Higiene y Seguridad en el Trabajo, Medio Ambiente, sistemas de red contra incendios, capacitaciones operativas y soporte administrativo para habilitaciones.

Por su parte, el ejecutivo reconoció que se observa un cambio en la actitud del operador frente a las tareas cotidianas que inciden en el cuidado ambiental. Acciones como el vaciado regular de cámaras de decantación, la limpieza de los residuos generados y la existencia de depósitos temporarios son prácticas que empiezan a formar parte del esquema habitual de mantenimiento.

Tierra contaminada, líquidos recuperados en cámaras, envases plásticos con hidrocarburos: todos estos desechos deben ser tratados bajo protocolos específicos, en plantas habilitadas y con transporte autorizado.

En muchas zonas del país, los operadores pequeños enfrentan dificultades para acceder a este servicio, ya que muchos de los proveedores disponibles no retiran menos de 500 kilos por razones de logística.

Parino Group ofrece una alternativa para los estacioneros del NEA, donde gestiona su planta Ecoparino, la única habilitada en la región, con transporte autorizado en las cuatro provincias del área, lo que le permite hacer retiros sin imponer mínimos de recolección.

Otro de los frentes en los que actúa la compañía es en los entrenamientos específicos dirigidos a operadores, con foco en las maniobras de carga y descarga de combustibles, principalmente en el trasvase desde camiones cisterna.

Estas capacitaciones no solo apuntan a reforzar la seguridad operativa, sino que incorporan criterios ambientales orientados a reducir la posibilidad de derrames, optimizar la manipulación de residuos y garantizar una trazabilidad completa del proceso.

“Aunque los sistemas evolucionaron, la operación sigue dependiendo del factor humano; por eso la capacitación no es opcional, es una inversión necesaria”, señaló Parino.

MÁS ALIADOS

Las tecnologías evolucionan y ofrecen una mayor protección ambiental, por lo que las compañías energéticas incentivan las inversiones en nuevos tanques de doble pared, geomembranas, pisos impermeables y dispositivos de telemedición, ya que son herramientas valiosas.

En esta línea, la reciente habilitación por parte del Gobierno nacional para instalar tanques aéreos en Estaciones de Servicio abre un nuevo escenario en la infraestructura de almacenamiento.

Frente a esta novedad, el referente de Parino Group aseguró que no implica nada nuevo ya que su uso es común en otras actividades y advirtió: “Hay que esperar a que se definan los productos autorizados para este tipo de instalaciones. Por ahora, solo se habla de diésel, pero si se habilitan las naftas, las exigencias deberán ser más rigurosas que en el caso de los tanques subterráneos”.

Asimismo, aún no existe un marco operativo detallado sobre cómo deberán instalarse y controlarse estos sistemas.

UNA AGENDA CADA VEZ MÁS TÉCNICA

El nuevo escenario operativo de las Estaciones de Servicio obliga a los operadores a profesionalizar su gestión en áreas que tradicionalmente eran relegadas. La relación entre lo ambiental, lo normativo y lo técnico ya no es secundaria: es parte central de la sostenibilidad operativa del negocio.

“Hoy ya no alcanza con cumplir lo básico. Hay que anticiparse, tener los estudios al día, los residuos bajo control, los sistemas funcionando y al personal capacitado. Eso es lo que hace que una estación opere con seguridad, sin sorpresas ni sanciones”, concluyó el especialista.