Consideran reformar el sistema de costos y beneficios para amparar a Estaciones de Servicio

El economista especialista en temas de combustibles Marcelo Ramal, mostró su conformidad en lograr un sistema más justo y equitativo que permita que el sector Pyme de las Estaciones de Servicio que brindan miles de puestos de trabajo, adquieran el significado que  se merecen en la cadena del negocio petrolero.

En ese mismo orden, quien además es legislador de la Ciudad de Buenos Aires, explicó que la posibilidad de un nuevo aumento de naftas y gasoil no se condice para nada con el nivel de precios internacionales del combustible que hace mucho tiempo que están en declinación.

Aseveró que el nuevo incremento provocará una nueva retracción en las ventas de las naftas y llevará a un nuevo subsidio por parte del consumidor a las empresas petroleras, además de una disparada de precios de los artículos de primera necesidad.

Al referirse al precio del “barril criollo” y la intención del gobierno de liberar el precio hasta niveles internacionales, Ramal contestó que “si los precios se alinean con los costos reales de extracción, entonces la renta petrolera se transfiere al conjunto de la sociedad, por el contrario, la ganancia es solamente de las compañías petroleras”.

Agregó que con el tiempo, la progresiva monopolización de la industria petrolera se extendió a los contratos abusivos de las destiladoras que transforman al estacionero en un rehén del denominado poder de marca.

“Todo este régimen debería modificarse y una apertura de costos integral de la industria petrolera debería sostener que el expendedor no quede cautivo de quienes descargan al consumidor la renta monopólica”, aseguró el dirigente de izquierda.

Finalizó opinando que una salida a esta política de sobreprecios debería ser auditada a través de una reestructuración integral de la industria del sector.