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Si bien el veto presidencial a la ley que retrotrae el precio de los servicios públicos a diciembre de 2017, está listo para ser firmado, los legisladores nacionales de la oposición consideran que una rebaja de tarifas mejoraría el costo del gas automotor
A la expectativa del tratamiento por parte del Senado de la Nación, de la Ley que propone retrotraer las tarifas de agua, gas y luz a noviembre de 2017 y establece que los servicios se actualizarán de acuerdo al Índice de Precios Mayoristas para las PyMES, el Diputado de Bloque Federal, Juan Brugge, adelantó que las mayoría de sus colegas de la Cámara Baja, ven en la iniciativa un fomento a la actividad de venta minorista de GNC y también al achique de los costos de las expendedoras de naftas, dado que alivia el denominado “tarifazo”.
El legislador cordobés, afirmó que sería lamentable para todos los ciudadanos y un golpe político importante si el Presidente decide vetar finalmente la ley y respecto del GNC aseguró que si las tarifas de gas vuelven a su costo de noviembre del año pasado y al ser considerados pymes, los estacioneros se verán enmarcados en la aplicación del índice de precios al consumidor y serán parte de los beneficiados por la intención del parlamento de poner un poco de equidad para brindar una oportunidad concreta de poder asumir el pago de las facturas.
“El gran problema que hoy tenemos es que si seguimos aumentando los servicios, el usuario común deberá optar por un recorte más profundo en sus consumos, lo que por ende traerá acaparado también una caída en las ventas de combustibles y un problema en el mantenimiento de la logística del transporte y la producción, que se abastece de gasoil y GNC”, afirmó Brugge.
Adelantó que de reglamentarse la nueva ley de tarifas, habrá que realizar nuevos cálculos sobre los aumentos progresivos del GNC en base a los precios en boca de pozo y el componente impositivo para que también baje el precio al surtidor.
Sin embargo, al referirse a las variables que finalmente inciden en el valor del m3, recordó la cotización del dólar y lo que llama “un nuevo jugador, el FMI, que ahora quiere imponer condiciones en materia energética también”, dijo.
Se refirió además a la noticia publicada en este medio en la cual, un estacioneros de GNC le reclama al Estado a través de la Justicia, que le sea devuelto el importe total “sobre pagado” en concepto de impuestos “mal cobrados” por las distribuidoras y las petroleras, en lo que considera una “doble imposición”, al momento de la crisis del GNC en 2016.
En ese sentido, Brugge afirmó: “el Congreso considera en la norma la emergencia en los cuadros tarifarios, como lo dice el expediente citado, pero en el sentido contrario al que lo aplica el Poder Ejecutivo, no para subir las tarifas, sino para dejar de aumentarlas y rebajarlas”.
Ese planteo se refiere a los comienzos y “resultaría muy interesante que una vez que el Juez de su fallo, el tema pueda ser tratado en el Congreso nacional, como base para dictar nuevas leyes en base a la jurisprudencia”, finalizó.
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