Conflicto político en Brasil podría dilatar las negociaciones por la venta de Petrobras

Brasil vive una grave crisis política. Dilma Rousseff, la máxima mandataria, perdió la confianza de la sociedad, apoyo de su propio partido político y de gran parte del poder legislativo. Por el momento resiste en el bastión de mando pero no se sabe por cuanto tiempo más podrá sostenerse.

Uno de los temas que afectaron la imagen de la presidenta tuvo que ver con la investigación por el “Lava Jato”, el escándalo de corrupción quizás más trascendente del país carioca. Es en este contexto que la filial local de Petrobras está en conversaciones para definir su venta a Pampa Energía, propiedad de Marcelo Mindlin.

Por eso, Víctor Bronstein, Director del Centro de Estudios de Energía, Política y Sociedad (Ceepys) asegura que se “puede complicar el acuerdo”, por la inestabilidad que sufre el Poder Ejecutivo. De hecho, aunque sin demasiadas explicaciones como ocurre en este tipo de transacciones, el 2 de abril la brasileña informó que se extendía por un mes el período de “negociaciones exclusivas“. Ahora vence el 2 de mayo.

Para colmo, en la última operación de este tipo Petrobras cedió parte de sus negocios en los combustibles al Grupo Indalo de Cristóbal López, hoy en el ojo de la Justicia por evasión de impuestos. Roussef no soportaría una nueva denuncia.

Bronstein agrega que en caso de haber un cambio de autoridades en Brasil “puede traer consecuencias” a la operación, al sostener que “la tradición es que cuando cambia el presidente cambia el directorio de Petrobras”. Siempre se busca alineamiento político. Es lo mismo que ocurre con YPF fronteras adentro.

“Para Argentina no es una buena noticia porque Petrobras desde hace unos años está en retirada y no tenía actitud de hacer nuevas inversiones sino de mantenerse. Uno esperaba que si Pampa tomaba la posta, avanzara con nuevos proyectos”, sostuvo el especialista ante la consulta de surtidores.com.ar.

El paquete de activos en venta incluye la refinería de Bahía Blanca, la extensa red de estaciones de servicio, acciones en la Transportadora Gas del Sur (TGS), la central térmica Genelba y la hidroeléctrica Pichi Picún Leufú, además de plantas petroquímicas.