Las ventajas que ofrece el uso del Gas Natural Comprimido son indudables. Basta solo mencionar sus cualidades medioambientales para considerar su aprovechamiento casi obligatorio, especialmente en los grandes conglomerados urbanos donde la contaminación hace estragos en la salud de los ciudadanos. Pero si este no es un argumento de peso para inclinarse por el GNC, si lo es su beneficio económico, ya que su utilización redunda en un ahorro de más del 70 por ciento en comparación con la nafta. 

La ecuación gana sustento cuando se lleva a la práctica. Para ello, surtidores.com.ar tomó como referencia un auto que realiza aproximadamente 2000 kilómetros mensuales y consume unos 200 litros de combustible líquido, y contrastó lo que sucede si lo hace a gas. Los cálculos se realizaron con una herramienta que la Cámara Argentina de GNC tiene a disposición en su plataforma web.

La diferencia entre cargar nafta Premium y GNC es muy significante, ya que si se asignan 200 litros mensuales a un valor promedio de 4.70 pesos, por mes el gasto es de 940 pesos, y al año 11.280 pesos. En cambio si se lo hace a GNC a un precio de 1.50 el metro cúbico, al mes se gasta unos 300 pesos, y al año 3.600, o sea 7.680 pesos menos, un 68.9 por ciento menos tal como toman de caballito de batalla las cámaras del sector.

Actualmente la diferencia entre combustibles es la más importante desde la instauración del GNC como combustible automotor.  Por ejemplo, en el 2006 la disparidad era menor, del 58 por ciento, pero hay que tener en cuenta la acumulación que tuvieron las naftas, especialmente las de mayor octanaje que sólo en este año llevan un 30 por ciento.

Ahora, qué sucede si se tienen en cuenta los valores de algunas estaciones de Córdoba que venden el GNC aún a 0.90 pesos. La diferencia es abismal, ya que con la nafta Premium actual al año el gasto se traduce en 11.280 pesos, contra los 2.160 pesos del “GNC cordobés”, unos 9.100 pesos de ahorro, aunque actualmente esta jugada del mercado está siendo analizada por la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia, por afectar al libre mercado.   

La tendencia del ahorro en el combustible continúa en el bolsillo de los argentinos y se demuestra en la venta de los sistemas de conversión a GNC. Después del record de las casi 10.500 en julio y de las 9.987 de agosto, en septiembre se mantuvo en la misma línea con 9.652 conversiones.

En cuanto a las cifras de los sistemas que se dan de baja, se mantienen en unas 2000 por mes, pero esto no quiere decir que haya disconformidad sino que atañen a una cuestión de modelos que se corren del parque automotor por su antigüedad. Las renovaciones correspondientes sumaron en agosto 105.241, la mayor cifra de este año, superando al mes pasado por 2.000, y mucho más se agranda si se compara con enero en donde las reposiciones llegaron a las 83.000.