Los vehículos que instalen un equipo de GNC desde el próximo 1º de enero, llevarán adheridos al parabrisas una oblea de color marrón cobriza similar a la utilizada en el año 2014.

Si bien los datos del nuevo adhesivo aun no fueron difundidos oficialmente, desde el ENARGAS confiaron que su tipografía será análoga a las anteriores manteniéndose inalterables el resto de sus características en relación al prototipo que la precedió, entre ellas la tinta reactiva a la luz ultravioleta y código de barras de variables bidimensionales.

Respecto a su costo, de acuerdo al proyecto de Ley de Presupuesto 2018 elevado al Congreso de la Nación, según una proyección de venta de 2.000.000 de obleas, se asignó el valor de $ 52,50 a cada una y de $ 17,50 la unidad de 2.100.000 cédulas Mercosur.

Con esta decisión se desestima –al menos durante el año venidero – la implementación de las Obleas de Carga “inteligentes”, una iniciativa en la que trabajan conjuntamente el Gobierno, la industria y los expendedores; que habilita o niega el despacho del combustible sin depender del operario el sistema.

MOTIVOS PARA RECHAZAR UNA OBLEA

Desde el Ente Regulador recordaron asimismo, las razones para invalidar la carga:

 Oblea apócrifa (trucha): se detecta porque la calidad del material es inferior, no tiene buen adhesivo, no posee los elementos de seguridad de la auténtica (microtexto, tinta negra con trama especial,  tinta UV, texto GNC randónico con tinta ópticamente variable, hologramas con las palabras “válido, auténtico, legítimo y original”, etc.).

 Oblea vencida: una oblea pierde su vigencia el último minuto del último día del mes perforado.

 Oblea en la mano (es obligación del taller que el vehículo salga con la oblea pegada).

 Oblea pegada en un trozo de parabrisas (la oblea debe ser parte del vehículo).

 Oblea pegada fuera del parabrisas (no cumple con lo indicado explícitamente por el   ENARGAS).

 Oblea con dos o más casilleros de mes perforados (la norma indica que debe ser uno solo).

 Oblea que no está adherida al parabrisas con su propio adhesivo (el operario debe estar seguro de que la oblea es parte del vehículo y esto solo se logra si se adhiere con el adhesivo propio de la oblea).

 Oblea que fue despegada y vuelta a pegar (no está permitido a talleres ni a usuarios pegar por segunda vez una misma oblea).

 Oblea en mal estado (rotura o cualquier otra deficiencia que afecte partes importantes de la oblea. Deben verse los doce casilleros de mes en buen estado y solo uno perforado, los elementos de seguridad, el número.

 Oblea rota por demás (aplicar el mismo criterio que para un billete: nadie recibe un billete roto en demasía aun cuando puedan observarse los elementos de seguridad: todo tiene un límite…).

 Cualquier otro motivo que genere duda o pueda presumirse que ante la ocurrencia de un siniestro la oblea delate un mal accionar del operario o la estación.