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El Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS) se encuentra trabajando en una acción comunicacional en las ciudades de la costa para difundir y evitar accidentes por inhalación de monóxido de carbono en los departamentos y casas de alquiler temporal en esta época estival
Para ello, promueve un acuerdo con diferentes actores sociales: la licenciataria Camuzzi Gas Pampeana, el Sindicato Único de Trabajadores de Edificios Rentas y Horizontal (SUTERH), el Colegio de Martilleros y Corredores Públicos de
Las organizaciones firmantes recibirán folletos informativos que contienen indicaciones, información y recaudos por tener en cuenta para evitar accidentes por causa del monóxido de carbono y asumirán el compromiso de difundir sus contenidos dentro de sus ámbitos de incumbencia.
El ENARGAS recuerda que muchas personas mueren cada año como consecuencia de intoxicaciones por monóxido de carbono, no sólo en época invernal, sino también en período estival. El monóxido de carbono es un gas que se produce por una mala combustión y falta de oxígeno en el ambiente. Este gas, altamente venenoso, se propaga rápidamente y no puede percibirse porque no tiene olor, color o sabor.
Los accidentes que ocurren en zonas de veraneo son causados por la falta de mantenimiento en las instalaciones internas de gas, además dichas disposiciones permanecen inactivas por prolongados períodos y, por tal motivo, las ventilaciones se deterioran o los pájaros construyen sus nidos y tapan los conductos de evacuación.
La experiencia indica que cuando se alquila o regresa a una vivienda en las vacaciones, antes de encender un mechero hay que hacer revisar la instalación por un instalador matriculado.
Es posible detectar la presencia de monóxido de carbono en el ambiente si por ejemplo aparecen manchas, tiznado o decoloración de los artefactos a gas, sus conductos de evacuación o alrededor de ellos. Asimismo, en las personas, una intoxicación puede manifestarse con síntomas de debilidad, cansancio, tendencia al sueño, en algunos casos puede producir dolor de cabeza, náuseas, vómitos, dolor en el pecho y pulso acelerado.
Ante la sospecha de intoxicación por monóxido de carbono se debe retirar a las víctimas del ambiente contaminado, ventilar ese espacio y llamar al médico inmediatamente.
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