Activar/Desactivar Leer Página
Instalar una boca de expendio cuesta cerca de 2 millones de dólares. Por eso, hoy las empresas petroleras que están interesadas en ampliar la red de estaciones de servicio encuentran en las sin bandera una herramienta más económica y viable para crecer en el mercado. Gran interés por la red de SOL.
Según cuentan de una consultora especializada en la compra-venta de bocas de expendio, en las últimas semanas dos compañías petroleras – una de gran trayectoria y reconocida en la plaza, otra que ya operó en el negocio y vuelve a apostar a la Argentina – se comunicaron con la intención de averiguar sobre locales que estén interesados en obtener su aprovisionamiento de combustibles y marca.
En general, explican en la consultora, solicitan información de establecimientos con un estándar de calidad medio – calificadas por encima de los 7 puntos – que no tengan problemas de daño ambiental, sean independientes o de bandera que estén atravesando la última etapa del contrato comercial con su proveedor, sin preferencia por la zona geográfica.
La red de comercios que quedaron bajo la insignia de SOL está en la mira de los inversores. Son en todo el país más de 60, pero en su gran mayoría están radicados en la zona centro, principalmente en Córdoba. “Hay rumores de que alguna empresa va a revivir la marca”, indicó la fuente consultada que prefirió no ser citada en la nota y conoce de cerca las negociaciones.
¿Por qué resurgió esta atracción por la venta minorista? A diferencia de años anteriores, están dadas todas las condiciones: consumo con expectativas de crecimiento, parque automotor en aumento, precios en alza y con perspectivas de seguir esta tendencia, y un costo del barril de crudo internacional por debajo de los 50 dólares, lo que hace rentable las operaciones de importación.
Además, los especialistas indican que es el momento justo, ya que todas las compañías avanzan en esta dirección, incluso las que hoy manejan gran participación en el segmento, por lo que no hay tiempo para esperar que la competencia acapare el nicho hasta saturar el mercado.
Por otra parte, hay todavía más de 600 puestos blancos con ansias de conseguir suministro constante y a valores más bajos de lo que cobran los distribuidores mayoristas. Manuel García, presidente de la Asociación de Estaciones de Servicio Independientes (AESI) asegura que “el mercado necesita de más proveedores para el sector sin bandera”.
DEJANOS TU COMENTARIO!