La sustentabilidad pasó a ser un valor que las marcas eligen mostrar a sus clientes como parte de sus estrategias comerciales. Tal es así que es un tema transversal que modificó desde la oferta y la atención, hasta las estructuras y sus materiales.

El arquitecto Patricio Pon, en diálogo con surtidores.com.ar, propone modelos de Estaciones de Servicio que contribuyan a construir un futuro más amigable con el medio ambiente. Para ello, asegura que es necesario permanecer en una suerte de “observatorio de lo que se viene”.

Actualmente, las distintas petroleras trabajan bajo este paradigma del triple impacto: económico, social y ambiental. Se puede reconocer cómo las estaciones han ido evolucionando hacia espacios más confortables, favoreciendo las experiencias de usuario e incorporando en forma complementaria todos aquellos recursos tecnológicos tendientes a automatizar el servicio y hacer más confortable la visita.

Tal es el caso de aquellas, que por ejemplo, implementan sistemas de recuperación del agua de lluvia para reutilizarla en la limpieza de la playa y riego de espacios verdes, o las que utilizan paneles solares, máxima digitalización y materiales de construcción sostenibles.

El concepto de sustentabilidad admite distintas formas de abordaje, por un lado, las ligadas a los adelantos tecnológicos como la incorporación de domótica, gestión de residuos, biocombustibles o cargadores eléctricos, entre otros.

Pero también, se puede aplicar a la propia estructura o aprovecharla para ello. “Podemos buscar soluciones estudiando la tradición constructiva del lugar y las características del entorno”, comenta el titular de PON Estudio de Arquitectos.

Es aquí donde se toman en consideración: la incidencia del sol,  sistemas de acondicionamiento térmico pasivo y herramientas de diseño económicas capaces de producir un ahorro sustancial de tiempo, costos y energía.

En este sentido, Pon comparte sus experiencias para brindar más herramientas a quienes están interesados en aumentar sus índices de sustentabilidad y aún no definen cómo hacerlo.

Según explica, la tendencia próxima es trabajar sobre las estructuras de las estaciones para que se conviertan en generadoras de energía para el autoconsumo. “Todo nos conduce a pensar que, aquellas que no se adapten a esos nuevos requerimientos van a ser cada vez menos competitivas”, agrega.

Por último, afirma que la elaboración y adaptación del modelo de negocio proviene de una lectura inteligente de las necesidades sociales y concluye: “Como estudio de arquitectura especializado reconocemos constantemente los esfuerzos conjuntos de petroleras y operadores en adaptar y mejorar su oferta de servicio para lograr resultados exitosos que potencien la estética y la identidad de la marca mientras que cuidan el medio ambiente”.