Desorden tributario
El presidente de la Asociación de Expendedores de Formosa, llamó la atención ante un tradicional debate que suele emerger en los momentos de crisis, como ser, la brecha entre las exigencias fiscales y la capacidad contributiva del estacionero.
Luis Bigatti, presidente de la Asociación de Expendedores de Formosa, comentó en diálogo con surtidores.com.ar que el desorden tributario afecta particularmente a las Estaciones de Servicio independientes “suman miles de millones de pesos en saldos a favor de Rentas, que nunca pueden ser recuperados como capital de trabajo”.
En ese aspecto, convocó a las autoridades a la formación de un espacio de discusión para modificar lo que considera como “el principal factor de riesgo y altos costos de un programa empresario en la Argentina, como es la voracidad fiscal”.
Bigatti recordó que este es un país federal, donde actúan tres jurisdicciones, la Nación, la Provincia y el Municipio, sin ningún protocolo de gestión ni coordinación de impacto tributario y resaltó que tras la cuarentena, se abre un panorama incierto y completamente diferente al mundo conocido, por lo que “es el momento de replantear las bases del sostenimiento de las fuentes de empleo privado”.
Agregó que el sistema judicial dejó de ser en ciertas jurisdicciones, una garantía de protección oportuna e independiente. “Es decir que no se respeta la capacidad contributiva, un factor esencial a la confianza indispensable para la inversión y el desenvolvimiento empresarial”, expresó el entrevistado.
Se refirió a la posibilidad de un control ciudadano sobre la “Economía Política”, para permitir o impedir que se abra la puerta para aquellos que tengan cierto tipo de poder o quienes pueden inferir daño, porque “nuestra actividad es con riesgo y existen abusos de funcionarios públicos, quienes crean costosas exigencias”, advirtió.
En otro orden de temas, al ser consultado sobre la crisis actual de las estaciones en pandemia valoró, sin embargo, como destacable y merecedor de reconocimiento y agradecimiento el subsidio, porque fue necesario para afrontar los sueldos y cargas sociales.
Recordó que “los precios del combustible tienen un alto porcentaje impositivo, con lo que, el apoyo para el pago de sueldos y contribuciones explica la reducción de la inflación y evita un mayor deterioro de la situación económica y social”, finalizó.
Al igual que en la economía de las Estaciones de Servicio, el impacto del aislamiento en la venta de naftas y gasoil provocó un importante perjuicio en las arcas del Estado, según un estudio realizado por el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF).
Referentes del sector de doce países de Latinoamérica suscribieron un acta en la que describen la crítica situación que atraviesan a causa de la emergencia sanitaria. Exigen soluciones inmediatas.
Dirigentes bonaerenses de diferentes municipalidades que poseen establecimientos de venta de combustibles buscan que las autoridades consideren rebajas y el no cobro de tasas zonales y provinciales.