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El Presidente de la Cámara de Expendedores de GNC, Enrique Fridman, informó en exclusiva para surtidores que a causa de los cambios implementados durante el año pasado, hubo cuatro establecimientos bonaerenses que debieron cerrar sus puertas
“Este año que comienza seguiremos en la tarea de pelear contra los molinos de viento, trabajando mucho para defender a los colegas expendedores de GNC, haciendo todas las gestiones y acciones que estén a nuestro alcance como institución”, dijo a surtidores.com.ar el Presidente de la CEGNC, Enrique Fridman.
Al respecto, recordó las contrariedades que debieron enfrentar los estacioneros de gas, luego de los efectos del aumento de los costos fijos como los insumos en dólares, el incremento de los sueldos de los empleados, la inflación general, el aumento de gas en boca de pozo y los cambios en las formas de facturación.
“Los incrementos de costos fueron muy duros con el gas vehicular que ocupa un escaso 7 por ciento del consumo total, los funcionarios no deben olvidar que este es un combustible de uso intensivo que aprovecha la clase trabajadora y cuya industria brinda empleo a más de 50.000 personas que hoy temen por su continuidad laboral”, coincidió Fridman.
En especial, el dirigente recalcó la necesidad de revisar el esquema impositivo del producto ya que a su entender “hay una excesiva cantidad de tributos que pesan sobre el precio final del GNC”.
Fue por estas causas, de acuerdo a sus dichos, que en el territorio de Buenos Aires, debieron dejar de operar 4 expendedoras de gas con la consecuente pérdida de puestos de trabajo y agregó que “hay otras estaciones en venta”.
Descartó que a causa de los nuevos incrementos de los precios de los combustibles líquidos, se incremente el volumen de ventas de GNC, ya que dijo: “es una cuestión estacional y durante el período de receso escolar hay muchos vehículos que no se utilizan para trabajar”.
Sin embargo, confió en que la ampliación del margen desde un 33 por ciento hasta lo que es a partir de ahora, de casi un 50, respecto de la nafta súper, pueda recuperar unos pocos puntos el volumen a partir de marzo.
Reiteró que a pesar de los cambios y los aumentos de los combustibles, el uso del GNC automotor “continúa siendo un buen negocio para los automovilistas y quienes trabajan en el sector transporte”.
Al respecto dijo que en un rodado de gran porte, se puede llegar a ahorrar más de 1 peso por kilómetro recorrido si se utiliza el GNC en lugar de la nafta. Es decir que al cabo de 100 mil kilómetros, el automovilista habrá economizado un total de 100 mil pesos, “con lo cual le serviría para renovar la unidad”.
Recordó que desde los años 80 cuando, se impulsó esta actividad, el sector privado creció y le dio trabajo a miles de personas, tanto en las 2 mil estaciones que funcionan en el país, como en la diversidad de talleres de instalación de equipos, nuevas tecnologías y empleo derivado del uso del GNC como el transporte de pasajeros y flete.
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