Agua en vez de nafta: un desarrollo argentino que amenaza revolucionar los surtidores

La falta de producción de hidrocarburos y la escasa capacidad instalada para refinarlos sigue impulsando el desarrollo tecnológico de los combustibles alternativos, como los sistemas de hidroinyeccion, basados en agua destilada como materia prima, o de sus componentes esenciales, como el oxígeno y el hidrógeno. Si bien hay experiencias muy exitosas en varios países del mundo, aún no están muy difundidos en el mercado interno, pero hay empresas de transporte que ya los han instalado con el objetivo de ahorrar en gasoil. Asimismo, las recientes investigaciones brindaron avances muy importantes, garantizando a los consumidores cada vez más ventajas económicas y ecológicas.

Según explicó Víctor Solmi, titular de Solmi S.A, una empresa líder en desarrollo de dispositivos para ahorro de combustibles fósiles a base de hidrógeno y agua, la marca ha fabricado mediante tecnología propia la primer “Celda de Hidrógeno” del país, de funcionamiento fría y seca, que produce Hidrógeno y agua sobre el mismo vehículo, consumiendo el combustible alternativo en el momento.

Las compañías de transporte público de pasajeros fueron las pioneras en recurrir a este tipo de dispositivos, que utilizan agua en reemplazo de gasoil para la combustión. No sólo disminuye la contaminación ambiental sino que también baja los costos ya que reduce el consumo. “Actualmente estamos orientando nuestros avances técnicos en función de los grandes consumidores de combustibles fósiles”, comentó Solmi. Y aseguró que con el correr del tiempo ha notado un interés muy importante por estos productos, debido al importante ahorro que genera sobre las empresas que tienen mucha demanda.

Según detalló el emprendedor, existen distintos desarrollos y equipos, tanto para uso de agua como de hidrógeno, que varían en precio según el tipo de tecnología a utilizar y el motor de combustión interna a aplicar. “Depende de cada dispositivo”, diferenció.

Algunas importantes marcas de automóviles de EE.UU y Europa han utilizado estos sistemas en varios modelos. Actualmente, Mercedes Benz de Alemania tiene una división de investigación que está analizando nuevos componentes para incorporarlos en alguno de sus prototipos tal vez en un futuro no muy lejano.