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Referentes de la industria aseguran que desde que entró a regular el mercado la Unidad Ejecutiva de Monitoreo, presidida por Axel Kicillof, comenzaron los problemas de rentabilidad. Proponen además la creación de una mesa de trabajo en la que se definan los lineamientos de mediano y largo plazo
Desde que el Gobierno expropió el 51 por ciento de las acciones de YPF el sector de los biocombustibles entró en un proceso de caída de las ventas, en principio, por las restricciones que aplicó la Unión Europea al biodiesel local, lo que afectó a las exportaciones y en consecuencia a las compañías grandes e integradas. Pero en lo que a Pymes respecta, la demora – y rebaja – de la publicación de los precios, generó la paralización total de la producción.
Fue en agosto de 2012, meses después que el Estado asumió el control de la petrolera estatal, cuando se actualizó el marco jurídico que regula la energía en general, creando organismos de control que desplazaron a la Secretaría de Energía y al Ministerio de Planificación Federal de la toma de decisiones políticas de los biocombustibles.
Teniendo en cuenta este retroceso, que dio por muerte las inversiones en la actividad, el Dr. Aldo Regali, ex Presidente del Comité de Leyes de la Cámara Argentina de Energías Renovables (Cader) elaboró un documento en el que plantea una serie de medidas que en su opinión colaborarían en el florecimiento de la industria.
Como primera respuesta, el experto plantea desarrollar un Plan Nacional de Biocombustibles – Bioetanol y Biodiesel – con proyección a diez años que permita inversiones y recuperos lógicos, así como el crecimiento de las economías regionales. Para ello considera imprescindible disponer “un nuevo marco regulatorio que permita establecer precios mediante una fórmula inalterable”.
Dado el conocimiento que presenta sobre la realidad del rubro, Regali propone “dejar en manos de la Secretaría de Energía el trato con los productores, y el manejo total de la política de Biocombustibles”, ya que es este organismo la Autoridad de Aplicación establecida por la Ley 26.093, en su artículo 4. Cuestiona que “la intromisión de otros Ministerios ha generado un caos del cual es difícil de salir sin lastimaduras”.
El referente del sector sugiere poner en marcha la Comisión Nacional Asesora para la Promoción de la Producción y Uso Sustentables de los Biocombustible, prevista en la legislación actual, a los fines de generar un “ámbito de intercambio mensual entre todos los actores de la cadena, instituciones relacionadas y Ministerios intervinientes”. En esta mesa de trabajo, considera que se podría analizar un proyecto sustentable para alcanzar un corte de Biodiesel con gasoil al 15 por ciento.
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