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Para los actores del sector, su uso representa una alternativa que puede incorporarse sin necesariamente elevar el costo que paga el consumidor en el surtidor.
El debate sobre el impacto que tienen los biocombustibles en el precio final de los combustibles fósiles es clave para los actores del sector energético, y especialmente para los dueños y operadores de Estaciones de Servicio. Entender cómo funcionan las mezclas y qué efectos reales tienen en la logística, la distribución y el precio, es fundamental para planificar la oferta y maximizar la rentabilidad.
Además, la creciente demanda de productos con menor huella ambiental y la necesidad de fomentar economías regionales sustentables obligan a analizar los biocombustibles desde una perspectiva amplia que contemple tanto su incidencia en costos como sus externalidades positivas.

En diálogo con surtidores.com.ar, Mariano Santillán, director provincial de Biocombustibles y Bioenergías de Córdoba, aportó su mirada sobre esta cuestión. Señaló que es un tema interesante para analizar en materia de desarrollo de precios y explicó que si uno tiene una buena logística de mezclado y distribución, pueden acompañar o acomodarse al precio final de los combustibles fósiles siempre que el corte se mantenga en un determinado porcentaje.
También resaltó los beneficios económicos y sociales asociados a la producción de biocombustibles. Destacó que el impacto fiscal para el Estado Nacional no sería significativo, ya que estos combustibles desarrollan otras externalidades como incremento de la cadena de valor, generación de puestos de trabajo y mejora en la calificación de la mano de obra.
Además, subrayó que incorporar estas alternativas en la matriz de abastecimiento permite que las estaciones de servicio puedan contar con una oferta más novedosa y sostenible. Según el funcionario, eso representa una ventaja concreta en términos de diferenciación comercial y servicio al cliente.

“Este tipo de productos puede darle al estacionero la posibilidad de ofrecer combustibles de baja huella de carbono en sus surtidores, y al mismo tiempo, dar mayor libertad a los consumidores para elegir qué tipo de energía quieren cargar”, afirmó Santillán.
“Para los dueños de Estaciones de Servicio, entender y aprovechar la incorporación de biocombustibles en la oferta puede ser un diferencial competitivo en un mercado cada vez más exigente y orientado a la sustentabilidad”, concluyó.
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