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La flexibilización de normativas generan incertidumbre en el sector, pero causa expectativas sobre las nuevas normas y los plazos obligatorios de realización de estos procedimientos obligatorios.
La reciente decisión del Gobierno de unificar el Instituto Nacional de Tecnología Industrial con el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, en el marco de las políticas de desregulación impulsadas por el ministro Federico Sturzenegger, llamó la atención en el sector de Estaciones de Servicio.
Esta reestructuración, junto con la implementación de la Resolución 276/2024, que permite la participación de entidades privadas en los controles metrológicos y la extensión del plazo de las verificaciones obligatorias de surtidores de uno a hasta cinco años, relaja algunas cuestiones legales pero plantea interrogantes sobre la eficacia y confiabilidad de los controles en el expendio de combustibles.

Históricamente, el INTI fue el organismo encargado de garantizar la precisión y seguridad de los surtidores en todo el país. Sus técnicos realizan verificaciones periódicas que incluyen la aprobación de modelos, controles volumétricos y la colocación de precintos que certifican la exactitud de las mediciones.
No obstante, los trabajadores del organismo alertaron a surtidores.com.ar que la desregulación y la apertura a entidades privadas en los controles podrían tener diversas implicancias para los propietarios de Estaciones de Servicio.
“La extensión del plazo para las verificaciones obligatorias permitiría reducir los costos operativos a corto plazo. Sin embargo, la falta de controles frecuentes podría aumentar el riesgo de sanciones en caso de detectarse irregularidades”, recalcaron en diálogo con ete medio.
Asumieron además que la participación de entidades privadas plantea dudas sobre la uniformidad y rigurosidad de los mismos, lo que podría afectar la calidad del servicio y la confianza de los consumidores.

Por otra parte, ante posibles fallas en los controles, los propietarios podrían enfrentar mayores responsabilidades legales y financieras, especialmente si se detectan irregularidades que afecten a los consumidores o al medio ambiente.
Si bien algunos actores del sector ven en estas medidas una oportunidad para reducir la burocracia y los costos, otros expresan preocupación por la posible pérdida de estándares de calidad y seguridad.
En este contexto, los entrevistados consideraron que es fundamental que los propietarios de Estaciones de Servicio se mantengan informados sobre los cambios normativos y evalúen cuidadosamente las implicancias de estas reformas en sus operaciones diarias.
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