La situación del GNC en Argentina está requiriendo una estrategia integral que involucre a todos los actores del sector. Sin una acción coordinada y mecanismos de financiamiento adecuados, el país está perdiendo la posibilidad de capitalizar su enorme capacidad de generación de gas.

Gustavo Frontera, expresidente de la Cámara Argentina del GNC y socio fundador y presidente de Gugagas Energy S.R.L., es un referente en la industria. Con una trayectoria de más de 15 años en el sector energético desempeñando roles directivos en empresas clave, dialogó con surtidores.com.ar acerca del desarrollo del gas vehicular en el país y sus perspectivas.

El GNC, protagonista clave de una jornada de debate entre estacioneros de todo el continente

Delegaciones de 13 países analizarán las políticas y regulaciones vigentes, así como la penetración del gas vehicular en el parque automotor y sus estadísticas, con el objetivo de conformar un mapa regional del sector.

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¿Cómo ve la situación actual del GNC?

Argentina está desaprovechando una oportunidad única. No está utilizando la capacidad de generación de gas que tiene, y el gas que no se usa en una ventana de tiempo determinada se vuelve obsoleto. Hay muy pocos incentivos para la migración al GNC como combustible de transición. Ni los organismos gubernamentales, ni las distribuidoras de gas ni las empresas logran generar un incentivo real para que el GNC sea una herramienta atractiva para los consumidores.

¿Cuáles son los motivos que llevaron al GNC a este presente de menor demanda y menos conversiones?

Desde hace varios años estamos perdiendo parque automotor a GNC. Según datos del ENARGAS, la cantidad de vehículos convertidos se redujo en más de 80.000 en 2024 y la tendencia sigue en 2025. La falta de financiación es el principal problema. Los consumidores no pueden convertir sus vehículos porque no tienen acceso a créditos accesibles que les permitan pagarlos con el ahorro generado por el menor costo del metro cúbico de gas.

¿Qué iniciativas propondría para mejorar la situación?

La única manera de revertir esta situación es con un plan de conversiones financiado, como se ha hecho en otros países de la región. Esto podría impulsarse desde el Estado o desde empresas privadas. La idea es que una empresa convierta el vehículo y el usuario final lo pague con un diferencial en el precio del gas al momento de la carga. Con la tecnología disponible, se puede crear una herramienta que vincule las estaciones de servicio con la empresa financiadora para recuperar el valor del kit de conversión.

Proponen desarrollar un plan para fomentar el GNC en los próximos 10 años

La pronunciada caída de la demanda de gas vehicular y la baja de las conversiones, impulsa el análisis de una estrategia para reflotar el uso de este combustible sustentable y económico.

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¿Qué papel juegan las Estaciones de Carga en este proceso?

Las estaciones son esenciales porque son el nexo que puede hacer viable el proyecto. Uno de los principales problemas del sector es la falta de coordinación entre los actores de la cadena de valor del GNC. Cada uno está enfocado en su propio negocio y no hay un plan integral para potenciar el GNC. Es fundamental que todos los involucrados trabajen en conjunto para impulsar nuevamente el crecimiento del sector.

Por su parte, el ENARGAS debe regular y apoyar las iniciativas que surjan desde la cadena de valor. No es un ente que pueda generar mayor demanda por sí mismo, pero en esta nueva gestión está mostrando voluntad para respaldar proyectos que se presenten al organismo.

¿Cómo impacta Vaca Muerta en este contexto?

Vaca Muerta es el mayor vector de crecimiento que tenemos en el país. El consumo de gas vehicular debería duplicarse, pero en lugar de eso, está cayendo. El transporte pesado puede ser clave para aumentar la demanda, ya que un solo camión a GNC consume lo mismo que aproximadamente diez vehículos livianos, dependiendo de su capacidad de carga.

¿Considera que el transporte pesado va a migrar al GNC?

Sin dudas, el transporte pesado es el que puede marcar la diferencia en el consumo. Desde hace años, el sector está mostrando interés en este combustible, que es más económico y más amigable con el medio ambiente. Sin embargo, la inserción de vehículos a GNC desde las terminales automotrices sigue siendo baja. Si no se fomenta la conversión de camiones diésel a GNC, el crecimiento será muy lento y perderemos la oportunidad de aprovechar este recurso disponible en el país.

ACERCA DE GUSTAVO FRONTERA

Es ingeniero industrial, especializado en la generación de negocios a nivel nacional e internacional, con una trayectoria de más de 15 años. Durante su gestión en la Cámara Argentina del GNC, trabajó en la promoción del crecimiento sostenible de la industria energética. Su expertise en desarrollo de negocios y gestión comercial le permite impulsar la innovación y optimización en la cadena de suministro de gas natural comprimido y soluciones para la industria del Oil & Gas.