Robaban combustible de la intendencia de Soriano y lo comercializaban a través de particulares

Una paciente investigación, a raíz de una auditoría, dejó al descubierto una maniobra ilícita, a través de la que funcionarios de la Intendencia de Soriano comercializaban combustible, lubricante y otros elementos que pertenecían a la comuna, a través de personas particulares ajenas a la institución.

El caso de ADEOMS (Asociación de Empleados y Obreros Municipales de Soriano) que se inició en mayo de este año, terminó con la formalización de su presidente, el tesorero y un particular, involucrados en la maniobra, aunque surgieron derivaciones que la justicia estudia en función de los aportes de los ahora formalizados.

Precisamente días pasados compareció el propio Intendente del Departamento en la Junta de Soriano, quien reconoció la sucesión de casos delictivos con varias derivaciones que aún se investiga.

HECHA LA LEY HECHA LA TRAMPA

Guillermo Besozzi, titular de la comuna, en su comparecencia ante los legisladores departamentales, se refirió al SISCONVE (Sistema de Contralor Vehicular) impuesto a nivel nacional. “No es solamente un régimen de vigilancia sobre los combustibles que se cargan a los vehículos, sino que hoy se complementa con un diagnóstico puntual de los movimientos de cada unidad, con gráficas, sistemas de ubicación y contralor del gasto en relación a la capacidad de los motores. Sin embargo, su uso no alcanza, porque la inventiva del ser humano es impresionante y por aquello de que `hecha la ley, hecha la trampa´, hay cosas que se escapan y más aún en la Intendencia por ser la empresa más grande del departamento” dijo con respecto a la violación del sistema.

El intendente de Soriano señaló que el principal problema no se ha dado ni en los combustibles, ni en los lubricantes, “sino en la arena, en la piedra y en materiales especiales que cuesta enormemente comprender cómo se hicieron determinadas maniobras”.

100 VEHÍCULOS

Besozzi recordó que en mayo se había hecho una auditoría sobre los combustibles, “aunque no es una cosa de todos los días, pese a que el control es permanente” detalló.

El jefe comunal, aclaró que la Intendencia consume al cabo del mes “un total de 120.000 litros de gasoil y unos 15.000 litros de nafta, además de lubricante, en un total de 100 vehículos que se mueven minuto a minuto y que vuelven complejo el control”.

Mientras tanto las investigaciones judiciales siguen su curso en busca de más implicados y mayores derivaciones en este proceso de robo.