La Secretaría de Energía determinó mediante la Resolución 1445/2012 la actualización del precio que se le paga a los productores de gas, de 15 a 60 centavos por metro cúbico. Con esto, las empresas recaudarían en conjunto 1300 millones de pesos que obligatoriamente tendrán que ser reinvertidos en la producción.

Como principal objetivo la normativa busca “asegurar y promover las inversiones necesarias para el mantenimiento, el aumento y la recuperación de reservas que garanticen la sustentabilidad de corto, mediano y largo plazo de la actividad hidrocarburífera”. En definitiva, el Gobierno quiere recuperar el autoabastecimiento energético para ahorrar en importaciones de GNL, que actualmente se están pagando a un promedio de 16 dólares por millón de BTU.

Por este motivo, Fausto Maranca, presidente de la Cámara Argentina de GNC (CAGNC) considera que “se está garantizando la continuidad de los proyectos del GNC”.

Si bien la medida generó cierta confusión entre los potenciales compradores de equipos de gas para autos, el directivo destacó que “no disminuyeron las conversiones”. A los pocos días de los anuncios oficiales se despejaron las dudas: la brecha de precios con las naftas seguirá haciendo conveniente el consumo de gas.

Por el momento, la Comisión de Planificación y Coordinación Estratégica del Plan Nacional de Inversiones Hidrocarburíferas determinó que  al menos por 30 días los precios de expendio del combustible de Gas Natural Comprimido ofrecido al público se mantendrán en los mismos valores de provisión vigentes al día 8 de agosto de 2012. No obstante, durante este mes las cámaras empresarias del rubro aportarán información para colaborar en la fijación de un valor razonable que contemple la rentabilidad de toda la cadena de comercialización.