Suele suceder que la combinación de circunstancias de diferente índole imponga en ciertos momentos de crisis un cuestionamiento sobre la continuidad de realidades asumidas como cotidianas. En el ambiente de las bocas de expendio de combustible, los hechos y las circunstancias parecen demostrarlo.

Esta discusión surge a raíz de los trágicos sucesos delictivos que han afectado al sector, incluido el crimen de un playero en una Estación de Servicio en Rosario, lo que llevó a los dueños de operadoras a replantearse el beneficio económico de esta ecuación.

Estaciones de Servicio cierran durante las noches en reclamo de medidas de seguridad

En ese aspecto, el contador Sergio Lazzarín, titular de PyME ON Line, brindó su visión sobre el tema en diálogo con surtidores.com.ar, señalando que según los datos que manejan en su consultora, la utilidad actual de las expendedoras no cubre los costos asociados con el turno noche.

Si bien el especialista que asesora a empresas proveedoras del clúster petrolero de Vaca Muerta, evitó opinar sobre los hechos policiales en sí, abordó la coyuntura económica global que todo esto implica.

Sus cálculos muestran que la ganancia bruta del sector por la venta de combustibles representa entre el 8 por ciento y el 10 por ciento del precio de venta al público en el surtidor. Sin embargo, dijo Lazzarín que “con los aumentos salariales, como el 43 por ciento en enero de 2024 seguido de un 14 por ciento en febrero y marzo, junto con la marcada disminución en las ventas desde febrero, han llevado a que el lucro se aproxime peligrosamente al 0”.

El especialista objetó además que a pesar de la supuesta mejora en el margen tras la liberación de los precios de los combustibles, la caída en las ventas impidió que este desarrollo se materialice. “En algunos casos, ni siquiera la oferta de productos y servicios adicionales, como opciones gastronómicas, resulta de ayuda debido a los altos costos y el bajo volumen de ventas”, observó Lazzarín.

“Hoy día el turno noche es totalmente ocioso e inutilizado”.

Agregó que también resulta fundamental tener en cuenta la pesada carga impositiva que enfrentan las Estaciones de Servicio. “Cerca del 28,6 por ciento de los ingresos son absorbidos por impuestos indirectos, donde el IVA representa el 15,6 por ciento, seguido por el impuesto al dióxido de carbono (0,6 por ciento) y el impuesto a los combustibles líquidos (9,6 por ciento), entre otros”, detalló el entrevistado.

Es importante recordar que los impuestos específicos han estado congelados hasta febrero de 2024 y que a partir de entonces, se están liberando con actualizaciones mensuales. “La medida se traduce en un comportamiento recesivo del consumidor”, finalizó Lazzarín.