Contradicciones políticas: CAMMESA se resiste a mezclar biodiesel para generación eléctrica

De acuerdo a datos de Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico SA (CAMMESA) en 2011 se generaron apenas 32.5 GWh de energía eléctrica a partir de la quema de biodiesel, en 2012 170.2 GWh, más de cinco veces que el año anterior, mientras que en 2013 creció a 2.2 GWh. El año pasado se frenó el proceso, resultando en valores similares, insignificantes en la matriz.

En principio, esto demuestra que no se producen inconvenientes técnicos en la mezcla del fósil con el diésel verde. Sin embargo, el argumento de CAMMESA es que las empresas que proveen los generadores no prevén en las garantías el uso de biocombustible. Por lo tanto, en caso de afecciones o roturas de las costosas máquinas (superan los 500 millones de dólares) no se harían responsables del arreglo y mantenimiento.

En este contexto, Claudio Molina, el  Director Ejecutivo de la Asociación Argentina de Biocombustibles e Hidrógeno, planteó contradicciones en la política pública: “el Gobierno estableció el uso obligatorio de biodiesel en generación eléctrica, cumpliendo con la ley 26.093, pero sin embargo CAMMESA no respeta la normativa”.

Se sigue importando diésel.  Y si bien el experto reconoce que dadas las condiciones actuales es más barato que el biodiesel (el barril crudo permanece en 50 dólares) cuestiona que “es una obligación legal, insoslayable”. Más del 60 por ciento de la energía eléctrica que produce nuestro país es térmica, y para ella se necesitan carburantes fósiles como el gas, gasoil o fuel oil.

Sosteniendo su posición, Molina recordó el artículo 7 de la ley 26.093: “Establécese que todo combustible líquido caracterizado como gasoil o diesel oil que se comercialice dentro del territorio nacional, deberá ser mezclado por aquellas instalaciones que hayan sido aprobadas por la autoridad de aplicación para el fin específico de realizar esta mezcla con la especie de biocombustible denominada “biodiesel”, en un porcentaje del CINCO POR CIENTO (5%) como mínimo de este último, medido sobre la cantidad total del producto final”.

En 2014, cuando CAMMESA abrió una licitación para adquirir biodiesel, estableció en el respectivo pliego, condiciones de calidad para este producto incompatibles con el precio que estipuló. Ello impide que hayan existido productores de biodiesel interesados en ofertar biodiesel, al margen del mayor riesgo crediticio que se le asigna a CAMMESA, en relación, por ejemplo, a YPF u otras petroleras que compran biodiesel en el mercado local.

 Problemas crecientes con la Autoridad de Aplicación

Molina denuncia que “hay un régimen de sanciones que no se cumple porque la Secretaría de Energía omite su aplicación. No sólo en este caso, también en otros”.

“Es contradictorio que el propio Dr. Axel Kicillof en una conferencia de prensa convocada en el Ministerio de Economía el 2 de diciembre de 2013, haya anunciado la implementación de uso obligatorio de biodiesel en la generación eléctrica (medida por cierto plausible), a partir de enero de 2014 (según lo estableció la Resolución 1125/13 de la Secretaria de Energía firmada luego de esa conferencia de prensa) y todavía este organismo no haga cumplir dicha medida, pasados más de quince meses desde el momento que debió implementarse la misma. Lamentablemente se acerca el invierno y todo indica que ya CAMMESA programó la compra de combustible mineral para este invierno, hecho que condiciona aún más la posibilidad que este año se cumpla con la referida obligación”, cuestiona.

Y agrega: “Pero no me sorprende, en estos últimos tiempos tengo una larga lista de incumplimientos de la Secretaría de Energía en el ejercicio de las funciones que le competen como Autoridad de Aplicación del Programa Nacional de Biocombustibles”.

“Para peor, este organismo ha creado una especie de “cepo informativo” respecto de la industria de biocombustibles, hecho que atenta contra la transparencia del Programa Nacional de Biocombustibles, el que fuera creado por el Gobierno de Nestor Kirchner, continuado por el Gobierno de Cristina F. de Kirchner, y el que sin dudas había constituido un caso exitoso de Política de Estado para la República Argentina”, apuntó.

“Muy probablemente la Presidenta de la Nación no esté al tanto de estos problemas generados por la gestión de un reducido número de funcionarios del área energética, ya que siempre intentó colaborar con la industria y con sus decisiones, tuvo una actitud muy positiva destacable, incluso, corrigiendo graves errores que se cometieron en el pasado por prejuicios o apresuramientos en la toma de decisiones (particularmente en la época en que Guillermo Moreno era por demás influyente)”, manifestó.

“Viendo el currículum vitae de la Secretaria de Energía Ing. Mariana Matranga, se observa su excelente formación en el tema energético (desde un perfil técnico, no político), por lo que le pido que se involucre más con la política de biocombustibles, seguramente si lo hace, tendrá posibilidad de rectificar muchos errores que se vienen cometiendo dentro del Organismo y que quizás, ella desconoce también en atención a la enorme complejidad de su agenda actual, la que tiene otras urgencias”, se esperanzó Molina.