Opinión: “no homologar aumentos superiores al 30 por ciento”

Juan Pablo Fantini, presidente de AOYPF, analizó las negociaciones paritarias, en un contexto en que el sindicato reclama un incremento del 45 por ciento. No sólo que no está de acuerdo con otorgar tal suma, sino que además advierte que recurrirán al Ministerio de Trabajo en caso de que alguna provincia firme por encima del 30.

Surtidores: ¿Sobre qué temas está concentrando la gestión AOYPF?

Juan Pablo Fantini: Estamos trabajando sobre el monitoreo del mercado y la rentabilidad de las estaciones y distribuidores, ya que vemos con mucha preocupación cómo afrontar los futuros aumentos de sueldos que se producirán con motivo del cierre de las paritarias. Y en la organización de nuestra III Convención Nacional que realizáremos el próximo 14 de Mayo en la Ciudad de Buenos Aires, en la cual esperamos una masiva asistencia de operadores de todo el país.

¿Hay prevista nueva reunión con YPF?

A la fecha no tenemos audiencias formales solicitadas, no obstante ello, estamos en diálogo permanente con directivos de la compañía, por distintos temas operativos y comerciales.

¿Cómo evalúa la negociación paritaria de este año?

Con mucha preocupación. Es absolutamente ilógico pensar en un incremento de sueldos del 45 por ciento. Nuestros análisis indican que tanto la red de operadores de YPF, como también los de otras banderas, no podrán afrontar un aumento de tal magnitud y se pondrá en riesgo la sustentabilidad del sector, y en consecuencia la estabilidad laboral de muchos puestos de trabajo.

Por ello, en el caso de negociarse aumentos irracionales en alguno de los convenios vigentes, evaluaremos la posibilidad de recurrir a todas las herramientas a nuestro alcance, empezando por el Ministerio de Trabajo para solicitar la no homologación de cualquier incremento por arriba del 30 por ciento para el año.

Por otro lado también  vemos con preocupación la habituales modificaciones de cláusulas de los CCT que año a año ocultan aumentos muy superiores a los difundidos y se vienen acumulando varios años seguidos, como lo son la antigüedad, presentismo ,manejo de caja, adicionales nuevos que se agregan, y otros conceptos que tiene impacto directo sobre los sueldos finales, lo cual claramente representan incrementos salariales encubiertos y de los cuales no se mencionan pero deben ser pagados por los operadores, y tienen un impacto de por vida en cada empresa, ya que son proporcionales a los básicos de convenio y acumulativos.

¿Le parece que se podrá llegar a un acuerdo en estos términos, viendo como vienen los planteos?

Nosotros creemos que tenemos que ser realistas todos los integrantes de la cadena de comercialización de combustibles, empezando por las petroleras que son las que fijan los márgenes, siguiendo por quienes intermediamos que somos los operadores y también los representantes de los trabajadores del sector.

Si bien los números en el último año han mejorado, no podemos olvidarnos de que situación venimos y también debemos considerar que el  2015 viene en franco retroceso, y eso debe preocuparnos a todos. Se debe generar un dialogo abierto entre todas las partes, trabajadores, entidades empresarias y petroleras; los operadores no podemos seguir siendo la variable de ajuste todos los años, es una larga historia que debemos terminar, y estamos dispuestos a colaborar en ese sentido, porque si no todos los años estamos pendientes de los aumentos salariales y tironeando por los porcentajes, es injusto que sea así tanto para los trabajadores como para nuestras empresas, tenemos que encontrar una solución definitiva que haga más previsible el proceso, pero para ello nadie puede desentenderse de la realidad.

¿Cuál es su opinión respecto a la adhesión del personal de las estaciones de servicio al paro del próximo martes 31?

Creemos que el reclamo gremial por el impuesto a las ganancias es absolutamente legítimo, ya que las bases imponibles para dicho impuesto no han sido actualizadas debidamente y son claramente distorsivas e injustas. De todos modos los operadores no somos parte de la medida de fuerza y como siempre se respetará la decisión gremial como un derecho constitucional.