Pese a que no hay conflicto entre empleados y las empresas, el martes pasado el Ministerio de Trabajo de la Nación dictó la conciliación obligatoria para frenar el cese de actividades que anunció el secretario general del sindicato petrolero de Río Negro y Neuquén, Guillermo Pereyra, para reclamar por los problemas de rentabilidad que atraviesan las destilerías de baja escala que operan en la zona.

Tres compañías están operando al 50 por ciento de la capacidad operativa debido a las complicaciones económicas que enfrentan para competir con productos importados, exentos de impuestos internos por ley. Se trata de Refinadora Neuquina S.A, perteneciente al Grupo MAS Energía, New American Oil y Fox Petrol.

Según indicaron fuentes del mercado a surtidores.com.ar funcionarios de la cartera que dirige Daniel Cameron estarían evaluando reducirles el precio del petróleo medanito y de otras calidades similares, imprescindibles para las plantas pequeñas y medianas. En la actualidad el barril se paga por encima de los 70 dólares.

Los consultados por este medio conocedores de las conversaciones, aclararon que no entrarían en el paquete las firmas grandes: YPF, Shell, AXION energy, Petrobras, Oil Combustibles y Refinor.

Por lo que sabe, también se está barajando la posibilidad de nivelar el trato impositivo con las naftas y gasoil importados. Es que bajo el modelo actual para las marcas de mayor peso es conveniente adquirir volumen proveniente del exterior que en los complejos industriales ubicados en la Patagonia.

Mientras tanto, el miércoles de la semana que viene vence la tregua que impuso el Gobierno al gremio petrolero, por lo que se esperan novedades en los próximos días. De la respuesta oficial depende que se extienda el conflicto y se paralicen los pozos de Vaca Muerta y del Golfo San Jorge.

Ante estas perspectivas se suma la presión de las petroleras, en puntual de YPF, preocupada por no interrumpir la producción de hidrocarburos.